Por qué no debes temer a la vejez SoySD.mx

Entre mis amigas, nuestros cumpleaños están parejamente distribuidos a lo largo del año, lo que nos asegura que siempre tengamos alguna razón para festejar.
Pero sucede que cuando cada una está de cumpleaños se le recuerda durante todo ese día que “está envejeciendo”, mientras a las que les quedan algunos meses para cumplir años no paran de hablar de su juventud.
Incluso tengo una amiga que se negó a hacer una celebración el día de su cumpleaños porque “ya estaba muy vieja” para ese tipo de cosas… Esa declaración me dejó perpleja, principalmente porque esta amiga sólo cumplía 25 años! ¿Por qué consideraría sus 25 años como una edad tan definitiva? Lo sorprendente es que no es la única que piensa así; he estado observando la apreciación general que tienen mis pares acerca de cumplir años este último año, y debo decir que el miedo de envejecer se ha apoderado de mis amigas como la plaga.
En la medida que se acerca mi propio cumpleaños, me pregunto si me sucederá lo mismo… Envejecer se puede manejar de dos maneras distintas, la ruta tradicional es estar miserable y mirar con pavor cómo disminuyen los días en el calendario.
Cada X que va sobre los días del año se asocia a dudas acerca de las decisiones pasadas y al poco tiempo que queda por delante.
Esta es la actitud que muchos de mis pares comparten, suspirando con asombro y con un poco de negación al darse cuenta de todo el tiempo que ha pasado.
“No puedo creer que ya estemos a…” es una de las clásicas aseveraciones cuando alguien nota que llegó un nuevo mes, otra temporada o un año nuevo.
Yo no quiero vivir así.
Yo quiero vivir como una persona que se despierta cada día con gratitud y entusiasmo.
Y cuando cada día acabe, no quiero sentir miedo por el tiempo transcurrido.
Quiero atravesar cada día con la convicción de que viví ese día bien y con mi mejor potencial.
Esta es la ruta alternativa.
¿Por qué habría de despertar el día de mi cumpleaños quejándome por haber cumplido 25? ¿Por qué habría de quejarme por tener la suficiente salud y oportunidades para haber llegado a este punto? ¿No sería más sensato expresar el aprecio que siento al respecto? ¿No sería mejor recibir el hecho de que envejecemos como un regalo anual en vez de vivirlo como un castigo? La obsesión de permanecer eternamente joven está mal enfocada.
¿Porqué razón deberíamos de envidiar a aquellos que son más jóvenes que nosotros? Es cierto, la juventud está llena de posibilidades, la promesa de un futuro y está llena de potencial, pero envejecer contiene y manifiesta las realidades del pasado.
La realidad presente habla del cumplimiento de propósitos, del haber forjado relaciones y de haber sobrevivido a épocas duras.
  La juventud no es digna de envidia porque con los años llega la experiencia y la sabiduría, ambas se deben llevar como banderas de orgullo.
Por lo tanto, nuestro miedo a envejecer debe ser vencido; se puede luchar contra él con aprecio y la voluntad de vivir la vida de manera activa, de participar de ella.
Di que sí más a menudo que no.
Reinventa tu lista de deseos frustrados como una lista de cosas por hacer.
Comprométete con tus ambiciones más locas y decide vivir tu vida con propósito.
Quizás esto suene como una prescripción demasiado optimista, pero imagina que te ganas la lotería; ¿te despertarías cada día con tristeza? No lo creo, probablemente estarías lleno de entusiasmo y sintiendo que el mundo es tu patio de recreo.
Ahora piensa que la vida que tienes ahora es como haberse ganado la lotería, tienes la suerte de estar vivo y de poder explorar el mundo buscando lograr tu máximo potencial.
Eres un ser vivo que respira que es capaz de realizar lo que quiera; eso en sí mismo es una gran fortuna.
Cada cumpleaños que podamos experimentar no debería ser recibido con desesperanza, sino con gratitud.
Yo elijo mirar hacia mi pasado con orgullo y alegría, no porque haya hecho las cosas perfectamente bien, sino porque todas las cosas que he hecho me han llevado a ser quien soy ahora y desde aquí puedo seguir viviendo para lograr ser con quien sueño ser.
Me niego a sucumbir al miedo que define a mi generación.
Cuando llegue mi cumpleaños en octubre, le daré la bienvenida a los 25 años a mi vida y los celebraré como el verdadero regalo que son.
  Con información de Elite Daily La juventud no es digna de envidia porque con los años llega la experiencia y la sabiduría RedacciónNormal