¿Qué son las sales aromáticas y por qué la NFL las prohibió? Excelsior

Ariel VelázquezAntes de cada jugada, justo cuando el balón está por ser centrado, George Kittle inhala con fuerza.
Lo hace rápido, enérgico, como si esa bocanada fuera el interruptor que activa su violencia controlada en el campo.
No es aire lo que respira, sino una ráfaga de amoníaco.
Sales aromáticas: un estímulo brutal que despierta los sentidos, acelera el pulso y empuja al cuerpo al límite.
Pero ese ritual, repetido durante años dentro de la National Football League, acaba de extinguirse.
La liga ha prohibido  el uso de sales aromáticas y paquetes de amoníaco, un anuncio que sorprendió incluso a los propios jugadores.
El primero en hacerlo público fue George Kittle, ala cerrada de los 49ers de San Francisco, quien interrumpió una entrevista en vivo para soltar la bomba:Me acabo de enterar.
La NFL acaba de prohibir las sales.
Las usaba en cada drive… Consideré retirarme.
Tenemos que encontrar un punto medio”, dijo Kittle.
#49ers George Kittle just crashed our set to break news that the NFL banned smelling salts and ammonia packets today.
Says he uses them every drive.
“I considered retirement.
We have to figure out a middle ground.
” pic.
twitter.
com/g8FJxJ1d5z— Mike Garafolo (@MikeGarafolo) August 5, 2025Kittle no exagera.
Para él , como para cientos de jugadores que han confesado usarlas,  el pequeño frasco que exhala vapores penetrantes era más que una herramienta: era parte del uniforme invisible.
Una extensión emocional del casco y los tachones.
Un catalizador mental.
Un hábito tan antiguo como brutalLas sales aromáticas (también conocidas como smelling salts o sales de amoníaco) contienen principalmente carbonato de amonio.
Al romperse o agitarse, liberan una bocanada de gas irritante que estimula el sistema nervioso central.
Su origen no es nuevo: se usaban en el siglo XIX para reanimar a personas desmayadas.
Con el tiempo, su uso migró a los vestidores deportivos.
TE PUEDE INTERESAR: Estrella de la NFL rechaza ser parte del plan de Donald TrumpEn la NFL, se volvieron parte del paisaje: en las laterales, en los vestidores, justo antes del kickoff.
Jugadores como Kittle, linieros ofensivos, defensivos y linebackers las inhalaban para alcanzar ese estado limítrofe de alerta.
Incluso personalidades como Joe Rogan las han elogiado en podcasts, describiendo su poder como “una patada en el cerebro”.
¿Por qué las prohibieron?Aunque la NFL no ha dado una explicación pública detallada, fuentes cercanas a la liga señalan preocupaciones sobre el uso recurrente de estimulantes sin supervisión médica, y el potencial impacto en la salud respiratoria y cerebral.
Varios expertos han advertido que su inhalación frecuente puede provocar irritación nasal, dolores de cabeza, alteraciones del ritmo cardíaco e incluso daños pulmonares en ciertos casos.
Además, su popularidad creció también fuera del deporte profesional: en gimnasios, redes sociales y entre adolescentes, lo que podría haber encendido las alarmas regulatorias.
El golpe a una culturaEl anuncio de la prohibición ha sido recibido con frustración por parte de los jugadores, muchos de los cuales ven en estas sales una herramienta legítima, no una droga ni un riesgo.
La prohibición marca un nuevo capítulo en la evolución del protocolo de salud y seguridad de la NFL.
Como ocurrió con los golpes casco a casco, los suplementos no regulados o el uso de toradol, la liga parece buscar un camino más restrictivo.
Pero entre bastidores, muchos se preguntan si esta decisión es el inicio de una desconexión con la cultura de quienes viven, respiran y sobreviven en el campo.
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