Las grandes victorias de México contra EEUU. Ante la amenaza de gravar 5% a las remesas, ahora será de 3.5%. Una gran victoria sería evitar que se gravaran Libertadbajopalabra.com

Armando Ortiz / Nunca el dinero, que los mexicanos radicados en los Estados Unidos, enviaban a sus familias en México había sido cargado con un impuesto. La lógica señala que ese dinero es parte del sueldo de jornadas laborales, del trabajo árduo que realizan los paisanos, de los negocios lícitos que llevan a cabo y que ya pagó impuestos. Sin embargo, en la era Trump, en donde los inmigrantes, legales o ilegales son el enemigo, pues había que ponerle la mano encima a esas remesas. Fue por ello que Trump ideó gravar el dinero que los paisanos mexicanos envían a sus familias con un 5 por ciento. Es una decisión del gobierno de los EEUU. Sin embargo una comisión del Senado fue a ese país a “negociar” que ese impuesto no se aplicara. ¿Cuál fue el resultado? Pues que no se gravará con un 5 por ciento, pero sí con un 3.5 por ciento; es decir, como quiera nos fregaron. Y todavía el embajador Esteban Moctezuma Barragán echa las campañas a vuelo y anuncia: “Buenas noticias sobre el cargo a las remesas. El comité de reglas aprobó el paquete de reconciliación con una enmienda que incluye una reducción del impuesto a las remesas del 5% al 3.5%, no obstante que hicieron mayores recortes a Medicaid y a incentivos fiscales para energías limpias. Este es un primer importante avance para la defensa de la economía de nuestros migrantes y sus familias”. ¿Y dónde está la buena noticia? Un impuesto que no existía y que daña la economía de millones de mexicanos, ahora se va a aplicar, no con un 5, pero sí con un 3.5 por ciento. Una gran victoria hubiera sido evitar que se gravaran las remesas. Muchos siguen sin aprender.

A la familia que fue grabada golpeando a joven vendedor de frutas les quemaron la casa y el auto; pudieron lincharlos

Misael, un joven vendedor de frutas de 22 años, fue brutalmente agredido por un padre y su hijo en la Avenida Independencia, esquina con 25 Sur, en Tehuacán, Puebla. Según testigos, el conflicto inició cuando los agresores, dueños de un taller cercano, exigieron a Misael que retirara su carrito de frutas por obstruir la visibilidad de su negocio. Ante su negativa, lo golpearon y estrangularon hasta dejarlo inconsciente. El ataque, grabado en video, desató indignación en redes sociales y protestas de vecinos, comerciantes y motociclistas, quienes exigieron justicia. Finalmente, los vecinos y comerciantes decidieron hacer justicia por mano propia. El reporte indica que vecinos de Tehuacán intentaron linchar a la familia que agredió al joven vendedor de frutas. Los pobladores de la zona prendieron fuego al local comercial, al automóvil y vandalizaron la vivienda de la familia Flores, quienes fueron videograbados golpeando hasta dejar inconsciente a un vendedor de frutas. La policía logró rescatar a la mujer que aparece en el video, quien por cierto fue la única de esa familia que trató de defender al joven. Los manifestantes apedrearon y prendieron fuego al negocio de los agresores, identificados como Julio y Gerson. Al parecer algunas personas siguen sin entender el poder de las redes sociales. Un video como evidencia en redes sociales no necesita testigos, jurado ni jueces. La sentencia es inmediata y puede ser sentencia de muerte.

Así dejaron la casa de Julio Flores y Gerson Flores, los agresores de Misael, el joven que vende fruta en Tehuacán; hubo hasta saqueo

Así como es lamentable que padre e hijo agredan a un joven de 22 años por ponerse frente a su taller para vender fruta y con ello ayudar a sus padres hospitalizados, también es lamentable que una turba de personas incendie el vehículo y la casa de los agresores; más grave es que parte de esa turba se haya dedicado al saqueo en la casa de los agresores. Eso no es civilización, es la barbarie. El periódico e-consulta publicó en redes sociales un video en el que se ve las condiciones en que terminaron el vehículo y la casa de Julio Flores y de Gerson Flores, padre e hijo que agredieron a Misael, un joven de Tehuacán que se gana la vida vendiendo fruta y verdura en las calles. El vehículo quedó completamente incendiado, la casa fue arrasada por las llamas y lo que salvaron los bomberos fue saqueado por la turba. Afortunadamente no hubo vidas que lamentar. La esposa de Julio Flores, madre de Gerson, fue rescatada por la policía. La señora, en el video que circuló, intentó evitar la agresión en contra de Misael; pero padre e hijo actuaron de manera irracional. Por donde se le vea es lamentable lo ocurrido. En redes sociales muchas personas aplauden la barbarie, aplauden que se haya hecho “justicia” a Misael. Algunos lamentan que no hayan atrapado a los agresores para lincharlos. Esas reacciones son de personas que no respetan la ley, no respetan la vida, no se respetan ellas mismas. Sirva de lección este caso para que, cuando nos enfrentemos a una situación de este tipo, optemos mejor por solucionar las cosas siempre mediante el diálogo y el respeto. Por cierto, las personas que grabaron el video y lo subieron a las redes, ¿imaginaron todo lo que iban a provocar?