Suman 2 mil infractores ´reciclados´ en 7 meses Frontera.info

Al menos 2 mil personas son remitidas de manera constante a la Estancia Municipal de Infractores (EMI), las cuales en su mayoría están en situación de calle y algunas padecen de alguna enfermedad mental, para quienes no se tienen centros especializados para atenderlos.
El director de la Estancia Municipal de Infractores (EMI), Orlando Rivera Camacho, informó que de 80 a 90 por ciento de las personas que son detenidas por las autoridades policiales vive en la calle.
"El dato que tenemos es como de 2 mil infractores los que tenemos identificados que ya tienen de tres a más ingresos", reveló.
"Hubo un caso en el 2017 muy llamativo, tuvo 82 ingresos, y la mayor parte de las sanciones las califica el Juez y les da 36 horas", detalló.
El funcionario destacó que desde el inicio de esta Administración Municipal la EMI imparte tres pláticas al día de lunes a viernes con el apoyo de centros de rehabilitación y grupos religiosos.
También cuentan con 15 regaderas y ropa, y jornadas de corte de cabello para quienes ingresan a la EMI.
Además, mencionó que tienen el derecho de ingresar a un centro de rehabilitación, sin que necesariamente acudan a las pláticas.
"El 70% de los infractores que han sido enviados a centros de rehabilitación, permanecen aún en tratamiento", subrayó.
Además, una vez a la semana la EMI recibe el programa de “Inclusión de Personas en Situación de Calle”.
Atención especializadaEl secretario de Desarrollo Social Municipal, Mario Osuna Jiménez, dijo que quienes padecen alguna enfermedad mental en ocasiones son remitidos a la EMI, por lo cual está en planeación un proyecto denominado “Villas de Atención”, donde puedan tener el apoyo que en verdad necesita.
"Muchos de ellos son personas tranquilas que lo único que están es enfermas y están divagando, y muchos de ellos son reportados, y en este caso la policía lo que hace es ir por ellos, y la única forma que tiene de atenderlos es canalizarlos a la estancia", manifestó.
"No tenemos desgraciadamente una capacidad de espacio en donde podamos darle la atención debida a estas personas y lo único que hacen es cumplir con el tema del arresto que son las 36 horas, y después otra vez”, añadió.
La edad promedio de las personas que viven en la calle es de 30 a 59 años, afirmó, y la mayoría padecen adicción a la mariguana, metanfetamina, y en menor grado el alcohol.
“Se concentran en los espacios de mayor afluencia de apoyo, tenemos ubicados los puntos estratégicos: la Central Camionera, la 20 de Noviembre, el Centro y la Línea, esos puntos en particular porque la gente va y les da de comer”, refirió.