Vladimir Krámnik puede pudrirse en el infierno: HN Excelsior

Vladimir Krámnik, insensible, es un hocicón irrespetuoso.
Los defectos humanos no tienen conexión con la actividad que se practica.
Hay espíritus que florecen en el cieno.
La experiencia revela que la inteligencia de algunos grandes maestros y ajedrecistas no se extiende más allá del tablero de juego.
Lamentables repercusiones se han generado, provocando indignación en la esfera del ajedrez, con la desaparición física del gran maestro Daniel Naroditsky.
La Federación Internacional de Ajedrez (FIDE) dio a conocer ayer un comunicado firmado por su presidente del ruso Arkady Dvorkovich, en el que va a remitir a la Comisión de Etica y Disciplinaria de FIDE todas las declaraciones públicas relevantes hechas por el GM Vladimir Kramnik, tanto antes como después de la “trágica muerte” del GM Daniel Naroditsky.
En Estados Unidos la reacción de Hikaru Nakamura, segundo mejor ajedrecista del planeta, ha sido fulminante, áspera, expresó: “Vladimir Krámnik es una vergüenza para el ajedrez.
Krámnik puede ir a pudrirse en el infierno”.
Mientras que el GM indio Nihal Sarin, de 19 años, ha dicho: “Esto tiene que terminar.
Las difamaciones sin rendir cuentas destruyen vidas”.
Durante un año Vladimir Krámnik, a raíz de perder un juego contra Naroditsky no sólo lo acusÓ públicamente de hacer trampa, sin presentar pruebas, sino que estuvo acosándolo intensamente  -con vehemencia que rayó en la paranoia, se refiere ahora en diferentes medios-, e insinuando que la mirada o algunos movimientos de Naroditsky en otros juegos lo delataban de estar haciendo trampa con algún módulo en la computadora o inteligencia artificial.
Krámnik también acusó al GM peruano mexicano José Eduardo Martínez Alcántara de hacer trampa al igual que al GM de la República Checa, David Navara, de 40 años de edad, 13 veces campeón de su país, quien reveló en meses anteriores que cayó en un estado de fuerte depresión ante las acusaciones veladas de Vladimir Krámnik, que consideró quitarse la vida.
La ceguera mental de Krámnik le impide darse cuenta del daño moral y sicológico que puede producir con sus difamaciones.
Navara, GM que goza de respeto, se quejó de que la FIDE no actuara con mayor energía contra Krámnik.
En junio pasado la FIDE solicitó a Kramnik que retirara una demanda por difamación contra Navara.
Tanto Martínez Alcántara como Navara son reconocidos por la práctica del juego limpio.
La vanidad, tontera e inmadurez de algunos notables del ajedrez han empujado a Krámnik como al noruego Magnus Carlsen y otros de hacer acusaciones frívolas, banales, huecas, sin fundamento; y lo que es peor sin demostrar sus palabras con pruebas.
Carlsen acusó a Hans Moke Niemann, entonces de 19 años, de hacerle trampa.
Y llegó al desprecio absurdo de abandonar la Copa Sinquefield 2022 tras perder ante Hans Moke Niemann en la tercera ronda del certamen.
Carlsen y Krámnik y algunos otros jugadores no han sabido adaptarse al momento revolucionario que vive el ajedrez: la aparición en racimo de talentos infantiles y adolescentes con meteórico progreso singularmente en ajedrez rápido y blitz.
Recientemente al prodigio argentino Faustino Oro de tan sólo 11 años le hizo morder el polvo al número uno del mundo.
Acaso hace un lustro era un acontecimiento impensable de que un niño pudiese en ajedrez derrotar al mejor del mundo.
Lo de Krámnik, (quien llegó al Campeonato Mundial usurpando el puesto de retador oficial al GM letonés-español Alexei Shirov.
Entre Garri Kaspárov y su alumno predilecto Krámnik arruinaron el esfuerzo del letonés, al presentar el argumento infantiloide y deleznable de que Shirov nunca le había ganado.
Alekhine nunca le había ganado una partida a Capablanca antes del match de 1927.
Fuera del tablero y de sus libros la vida de Kaspárov carece de interés), rebasó lo ético con declaraciones posteriores a la muerte de Naroditsky.
En el comunicado de ayer de la FIDE señala: “En los últimos tiempos, el debate público en el mundo del ajedrez ha traspasado con demasiada frecuencia los límites de lo aceptable, perjudicando no sólo la reputación de las personas, sino también su propio bienestar.
Cuando esto sucede, las discusiones pueden derivar en acoso, intimidación y ataques, una preocupación particularmente grave en el contexto actual.
“La comunidad ajedrecística ha respetado desde hace mucho tiempo los logros del GM Vladimir Kramnik, y sus contribuciones a nuestro deporte son innegables.
Sin embargo, los mismos altos estándares que acompañan a los logros también implican la responsabilidad de defender los principios de equidad y respeto, y de ser embajadores del deporte”.
Nacional: Caruana vence a Shankland y es líder único, con 6 ½ puntos, en el Nacional cerrado que se realiza en Saint Louis.
  Columnista: Arturo Xicoténcatl.
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