Un verdadero choque de trenes Sol Yucatán
Por Freddy Ríos Urcelay
La noche del 5 de septiembre de 1979, se pusieron en juego dos títulos estatales de boxeo en la plaza de toros Mérida; por un lado, el de peso mosca entre Juan Herrera contra Marco Antonio “Chino” Benítez y, por el otro, el de peso ligero, entre Juan “Dinamita II” Hernández Soberanis y el zurdo Guadalupe Pérez.
La contienda de peso ligero fue un verdadero choque de trenes; Hernández entrenaba en el gimnasio “San Francisco de Asís” bajo la dirección de don Edilberto “Beto” Rivero Segovia y su adversario en el gimnasio “Bosco” de don René Villalobos Aguilar.
Tanto Hernández como Pérez se distinguían por su fuerte pegada y una férrea voluntad a prueba de espanto. Los primeros 5 episodios inclinaban la balanza por el lado de Lupe por su puntería y frecuencia de envíos; pero los que le llegaban de enfrente eran con más potencia. Para la sexta vuelta, en un frenético intercambio de fogonazos, Lupe salió cortado del párpado superior izquierdo.
El réferi Juan Miranda detuvo las acciones para llevar al del “Bosco” a revisión médica, donde el doctor Jesús Cuevas López dio luz verde para que el encuentro continuara. Vuelven a la carga y Hernández logra colocar un certero derechazo que tumbó a su antagonista para la cuenta de evaluación.
El réferi consideró que la reyerta podía continuar; pero Lupe estaba en mal estado y fue la campana la que llegó en su auxilio. El gong los llama a continuar y Hernández no soltó la iniciativa. Ya el ojo derecho de Lupe Pérez estaba completamente cerrado. Valiente intentó detener a Hernández y ensayó un golpe salvador, pero ya todo fue inútil y a los 54 segundos del raund, Miranda detuvo las acciones para que Juan Hernández se convierta en el octavo campeón estatal de peso ligero para Yucatán.
La de pesos mosca fue un recital entre dos yucatecos que estaban señalados para hacer historia de la buena. La guardia zurda del “Chino” Benítez no fue factor para complicar la cátedra de Herrera, que supo dominar con velocidad a su más experimentado adversario. No obstante, Benítez estuvo a punto de dar vuelta al resultado dominando con claridad los raunds 11 y 12, pero el golpe que buscaba nunca llegó y Juan Herrera Marrufo ganó por decisión, coronándose como el titular estatal número once de la categoría reina para Yucatán.
A fin de cuentas, Marco Antonio “Chino” Benítez fue campeón nacional y Juan Herrera lo fue mundial; pero esas son otras historias.
De vuelta al siglo XXI, se encuentra muy cerca ya la realización del segundo torneo “Semillero de Boxeo Peninsular”, donde se han inscrito más de 200 participantes de Campeche, Quintana Roo y Yucatán. La sede será el centro deportivo del sindicato de burócratas ubicado en el periférico poniente de Mérida, entrada al fraccionamiento Chenkú. ¿Las fechas? Con gusto, será del viernes 12 al domingo 14 de septiembre, a partir de las 2 de la tarde, y el ingreso es libre para el público en general.
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