El caso del adolescente que tiene familia de policías, atacó a compañeros de colegio y lo acusan de tener contactos con Isis Infobae
El adolescente de 17 años fue allanado por la PFA a raíz de presuntos contactos con grupos terroristas. Ese mismo chico, que tiene familiares policías, protagonizó en abril un violento episodio en la escuela de Ensenada a la que asiste, indicaron fuentes del caso a Infobae.
Ocurrió en la Secundaria N°5 de El Dique, durante el turno mañana, cuando uno de los estudiantes sacó una navaja en el patio del establecimiento y atacó a dos hermanos.
Cuando la Policía llegó al lugar, tras un llamado al 911, encontró en el suelo a una alumna de 16 años con un corte en el pómulo derecho, mientras que su hermano, de 12, tenía una herida en la ceja.
Ambos fueron trasladados, fuera de peligro, por una ambulancia del SAME al Hospital Cestino, donde recibieron puntos de sutura.
En tanto, el agresor, que había sido retenido por las autoridades de la escuela, fue aprehendido por los policías quienes, además, le incautaron la navaja.
La Unidad Funcional de Instrucción (UFI) del Joven N°3 del Departamento Judicial La Plata lo imputó por “lesiones” y, luego, fue liberado.
Sin embargo, ese incidente encendió las alarmas de los investigadores que seguían sus pasos desde febrero pasado por sus presuntos vínculos con el Estado Islámico (ISIS), de acuerdo a un reporte del FBI que llegó al Ministerio de Seguridad Nacional.
Otro motivo de preocupación en torno al adolescente está relacionado con su entorno familiar: su mamá es integrante de la Policía Bonaerense, al igual que su padrastro. Es decir, que el menor sospechoso tiene acceso a armas, un dato que genera inquietud.
Tras la agresión en el colegio, su mamá lo dejó en la casa de la abuela, ubicada en la localidad de Melchor Romero. Por esa razón, no fue tan sencillo para los federales encontrarlo. Lo lograron tras el análisis de impacto de antenas y la utilización de un software especial.
Aunque no fue detenido, quedó notificado del expediente en su contra, que tramita en el Juzgado Federal en lo Criminal y Correccional N°1 de La Plata, a cargo de Alejo Ramos Padilla. En el caso, además, interviene la Fiscalía Federal en lo Criminal y Correccional N°1 de La Plata, de María Laura Roteta.
La investigación se mantiene bajo estricta confidencialidad debido a que la causa continúa en etapa de instrucción, señalaron las fuentes del caso a este medio.
Durante los procedimientos, los agentes secuestraron un pistolón y municiones. Al mismo tiempo, incautaron un celular y una computadora que están siendo peritados.
Los encargados de la causa están particularmente interesados en el contenido de los dispositivos electrónicos del adolescente para determinar el alcance de los contactos del menor con grupos extremistas.
Por lo pronto, las fuentes confirmaron a este medio que el adolescente mantuvo algunas conversaciones a “nivel regional” que refuerzan la hipótesis del FBI.
El caso
La investigación se originó a partir de un informe del FBI remitido a la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal, en el que se advertía sobre un menor en Argentina que habría iniciado contacto, a través de una red social, con personas asociadas al Estado Islámico y manifestaba interés en ataques de tipo “lobo solitario”.
Tras recibir el reporte, la Fiscalía Federal ordenó una investigación a cargo del Departamento de Investigación Antiterrorista (DUIA), que permitió identificar al joven e individualizar su domicilio.
El informe también hacía referencia a un grupo en línea vinculado al Estado Islámico de Irak y el Levante (ISIS).
Los investigadores determinaron que el adolescente mantenía contacto por un grupo de chat con un ciudadano uruguayo detenido por causas similares. Esta conexión internacional fue uno de los elementos que motivaron la intervención judicial. Creen que no habría sido la única.
