Trabajadores del INTI intentaron cortar la avenida General Paz y hubo enfrentamientos con la policía Infobae
En el medio de la llegada del fin de las facultades extraordinarias, el Gobierno prepara una serie de cambios en diferentes organismos a través del Boletín Oficial que podrían ser anunciados en los próximos días. En ese marco, uno de los entes que podría tener modificaciones es el Instituto Nacional de Tecnología Industrial (INTI).
La tensión creció en las últimas semanas dentro del sector público ante versiones sobre la inminente reestructuración de organismos estatales y llevó a los trabajadores del organismo nucelados en la Asociación Trabajadores del Estado (ATE) a realizar una movilización e intentar cortar la avenida General Paz.
La posibilidad de que el INTI atraviese profundas modificaciones se da en un contexto de ajustes y racionalización administrativa impulsados por el Poder Ejecutivo antes de que expiren las atribuciones delegadas al presidente.
En ese sentido, los trabajadores remarcaron que el funcionamiento del INTI es clave para la industria y la investigación tecnológica en el país, con una importancia estratégica tanto para la política productiva nacional como para los propios empleados. Dirigentes gremiales manifestaron inquietud ante el posible impacto que podrían tener las medidas no solo sobre las condiciones laborales, sino también respecto de la continuidad de proyectos científicos y servicios de asistencia técnica.
La crisis se reflejó con crudeza este lunes cuando, pasadas las 11 de la mañana, un grupo numeroso de trabajadores intentó cortar la colectora de la avenida General Paz, en la ciudad de Buenos Aires, para rechazar la reestructuración dispuesta por el Ejecutivo según confirmaron fuentes oficiales y gremiales. Efectivos de la Policía de la Ciudad se hicieron presentes de inmediato y aplicaron el protocolo antipiquete para restablecer la circulación, lo que desató un enfrentamiento con empujones, golpes y corridas en la zona.
Durante el operativo, la policía avanzó sobre los manifestantes, liberó el carril de la colectora y detuvo en el acto a tres personas identificadas como trabajadores estatales, lo que generó la protesta de la dirigencia gremial. La tensión derivó en la intervención de referentes sindicales de la Asociación Trabajadores del Estado (ATE), quienes denunciaron vaciamiento institucional y represión.
El secretario general de ATE Nacional, Rodolfo Aguiar, responsabilizó al Ejecutivo y declaró públicamente que “es el Gobierno el que nos declaró la guerra y decidió hacer del Estado un gran campo de batalla. Entonces tienen que saber que vamos a guerrear, que no nos vamos a rendir, que vamos a pelear hasta ganar. Se van a tener que ir por la puerta de atrás”, dijo en conferencia transmitida por medios sindicales.
Aguiar también alertó que “quienes pretenden gobernar a decretazo limpio pierden legitimidad. Si permitimos que por decreto modifiquen las estructuras institucionales del INTA, del INTI y de numerosos organismos, se habrá desatado una masacre sobre toda la industria y la producción de nuestro país”, afirmó ante decenas de delegados reunidos en el lugar.
Las autoridades de ATE anticiparon nuevas medidas de fuerza y declararon el estado de asamblea permanente frente a los hechos.
El conflicto se produce en paralelo a una revisión de organismos públicos que el Poder Ejecutivo prevé llevar adelante a través de normas que serían publicadas en el Boletín Oficial en las próximas horas.
Según lo que publicó Infobae, el alcance de los decretos comprenderá al Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), el Instituto Nacional de Semillas (INASE), el Instituto Nacional de Vitivinicultura (INV) y el Instituto Nacional de la Propiedad Industrial (INPI), junto al INTI. La reestructuración, planteada en vísperas de la pérdida de las facultades extraordinarias, busca reducir costos operativos y replantear funciones centrales de estos organismos, aunque persisten dudas sobre el impacto concreto en las áreas técnicas y administrativas.
Las próximas jornadas se prevén de alta tensión para el sector público y la industria tecnológica nacional, con gremios movilizados frente a los cambios institucionales que prepara el Gobierno.
