Él es Auston Matthews, la máxima estrella del hockey sobre hielo y es hijo de una sonorense El Imparcial
En un deporte tradicionalmente dominado por canadienses, estadounidenses y rusos, el nombre de Auston Matthews sobresale como capitán de los Maple Leafs de Toronto, una de las franquicias más icónicas de la NHL, sino que también es el máximo referente del hockey en Estados Unidos.
Lo que pocos saben es que Matthews es hijo de una hermosillense: Ema Martínez, quien fue el motor que impulsó el sueño que hoy lo tiene convertido en superestrella.
Del desierto a la cima del hielo
Nacido en California y criado en Arizona, Auston no parecía destinado a destacar en un deporte tan ajeno al calor del desierto. Desde pequeño se debatía entre dos pasiones: el beisbol y el hockey. El primero, lógico para el clima; el segundo, alimentado por la presencia de los Coyotes de Phoenix y el corazón tenaz de su madre.
Poco a poco, el hielo le ganó la batalla al diamante, y el joven Matthews dejó atrás el guante y el bat para convertirse en el arma más letal del hockey estadounidense.
Crecer en un ambiente de dos culturas me permitió contar muy buena comida (risas). Desarrollar las habilidades en el hockey para mí, fue muy distinto si lo comparas a un chico de Michigan o de Canadá, no era el deporte tradicional en mi familia, pero mis padres se dieron cuenta de que tenía una gran pasión por el hockey y me dieron el apoyo necesario”.
En lugar de seguir el camino colegial, Auston apostó por algo inesperado: irse a jugar a Suiza con el ZSC Lions en 2015. Tenía apenas 17 años, pero ya mostraba madurez, físico e instinto de élite. Ahí sumó 46 puntos en 36 partidos enfrentando a adultos, bajo la dirección del veterano Marc Crawford. El salto a la NHL era inevitable.
Una guerrera madre mexicana
El talento de Auston es innegable, pero su historia no se entiende sin mencionar a doña Ema, originaria de Hermosillo, Sonora. Ella fue quien sostuvo el sueño con sus propias manos.
Trabajaba en la mañana en Starbucks, en la tarde en el restaurante, tuve la suerte de tener dos trabajos. Y créeme, si hubieran tenido más horas, yo hubiera agarrado más trabajos”, declaró doña Ema.
Las horas de hielo, la equipación, los entrenadores, los viajes… El hockey juvenil no solo es demandante físicamente, también es brutal financieramente, y para la familia Matthews, especialmente para Ema, el costo era intimidante. Pero jamás se echó para atrás.
Mi mamá viene de una familia grande, con muchos hermanos y hermanas y sí, jugué béisbol cuando estaba pequeño. Pero a todos ellos, mis tíos, tías y ese lado familiar, les pareció genial que yo jugara un deporte tan diferente como es el hockey, obviamente no el más tradicional en México, pero no sólo mis padres, sino toda mi familia mexicana estaba encantada de que yo hubiese escogido un deporte distinto y por eso, iban a mis juegos y celebraban con pasión cada uno de mis goles", dijo Auston.
Mientras muchos niños de Arizona jugaban beisbol bajo el sol, Auston viajaba kilómetros cada semana para entrenar, con su mamá al volante.
Ella nunca se quejó. Nunca dejó de apoyarme. Sin ella, esto no sería posible”, mencionó con gratitud, Matthews.
Un debut de hollywoodesco
En 2016, Matthews fue elegido como la primera selección global del Draft por los Maple Leafs de Toronto, una franquicia que no tenía a un jugador de esa talla desde hace décadas. Su debut fue histórico: cuatro goles en su primer juego, algo que no ocurría desde 1917. Terminó su temporada de novato con 40 goles, ganó el Calder Trophy al Novato del Año y devolvió a Toronto a los playoffs después de más de una década de oscuridad.
Desde entonces, ha roto todos los récords posibles para un jugador estadounidense:
- Tres veces ganador del Trofeo Rocket Richard (2021, 2022, 2024) al máximo goleador de la NHL.
- Más goles en una temporada para un Maple Leaf: 69 goles en 2023-24.
- Primer estadounidense en anotar 60 o más goles en dos temporadas distintas.
- Más de 400 goles y 700 puntos en menos de nueve años de carrera.
El 14 de agosto de 2024, Matthews fue nombrado capitán número 26 en la historia de los Leafs, y el primer estadounidense en portar la “C” en los 107 años del equipo. Un orgullo que su madre sigue celebrando, desde su corazón mexicano.
Orgullo sonorense
Aunque Auston Matthews representa a Estados Unidos en torneos internacionales —y se perfila como el gran líder de la selección para los Juegos Olímpicos de invierno Milano-Cortina 2026—, en Hermosillo su nombre debe darse a conocer, porque no todos los días el mundo ve brillar a un hijo de madre sonorense como la máxima figura del hockey global.
La comida mexicana es mi favorita y por razones muy válidas. Tanto a mi papá como a mi mamá les gusta cocinar y eso hace que tengamos una buena variedad. Ahora y por lejos, tengo que decir que mi plato favorito es la sopa de tortilla de pollo que hace mi madre. Cada vez que regreso a casa, después de una temporada, es lo primero que busco y nunca me ha decepcionado", dijo Matthews en español durante una entrevista para NHL.es.
El sacrificio de Ema es un espejo de muchas madres mexicanas: silenciosas, firmes e incansables. Y Auston es el fruto de ese amor transformado en disciplina. Más allá de los trofeos, las estadísticas y los récords, esta es una historia de una madre valiente originaria de “la tierra del esfuerzo”.
