Compleja transformación y derivaciones del final Excelsior
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En las partidas de la modalidad Fischer Random, 960, no podía ser de otra manera, lo firmaría Perogrullo, una vez que se difumina la complejidad de la apertura y el medio juego, se llega a la fase del final con las características semejantes o idénticas al ajedrez clásico.
Los GM del tablero juegan el final por el conocimiento de la teoría.
Por cierto, el exmonarca mundial Tigran Vartanóvich Petrossian, quien nació el 17 de junio de 1929, hace 96 años, se sabe que estudió concienzudamente dos libros: Mi sistema, del letonés Aaron Nimzowicht, y Finales artísticos, modelos de dominación, del armenio Guénrij Kasparian, quien recopiló más de 19,000 finales de notables compositores, entre ellos de Reti, Kúbbel, Troitzky, Rinck, Cherón, los hermanos Plátov, sólo para dar una ligera idea del ingente esfuerzo, la entrega y el amor que hay en el intento por alcanzar los más altos niveles del ajedrez.
Los maestros juegan además por asociación de ideas, cuando identifican o reconocen posiciones o patrones.
Hace una semana señalábamos una idea, medianamente generalizada: que del centón de partidas del Fischer Random o 960, ajedrez aleatorio en las que se rompe la posición original del clásico, no se producían combinaciones de tanta belleza o riqueza combinatoria como en éste.
La realidad es que Vincent Keymer, con las negras, dejó constancia de una brillante combinación en el remate final en su partida contra Lukas Leisch (publicada en la tercera semana de abril) en el Festival Grenke, en la modalidad Freestyle, 960, creación del undécimo monarca mundial, Bobby Fischer.
En el juego que presentamos este lunes Nakamura-Rapport, cuando el peón blanco se instala en h6 con los peones negros con vértice en g6 -ya presencia de Dama y caballo blanco-, brota de inmediato la perspectiva de combinación de mate con la Dama en g7 o bien combinaciones ganadores, con el caballo situándose en las casillas f6 o bien en o e7.
El quid estriba en poseer conocimientos y técnicas.
En la posición que presenta con Blancas (3) Th8, h7 y Cd1.
Negras (1) Re7 el desenlace del final, como lo expresa el maestro FIDE, físico de la UNAM, Manuel López Michelone, “Se sabe o no se sabe”.
Las negras juegan.
De los dos movimientos naturales, uno conduce a las tablas y otro a la derrota.
No se trata de águila o sol, sino del conocimiento de los finales básicos.
Esta posición se presentó en la partida Freestyle en el Festival Grenke, en la región de Karlruhe, Alemania, el 21 de abril, entre Nepomniachtchi y Rasmus.
Dentro del propio final hay derivaciones que si no se conocen pueden trastocar la victoria en empate o incluso en la derrota.
En los 70s nos vimos, en el Nacional en la AOFM, cómo una veracruzana, que más tarde llegaría a campeona, empató una partida que tenía ganada ante la monarca nacional porque no conocía el concepto básico, elemental, de oposición en lucha de piezas negras en Rf4 y g4 contra Rg1.
Para seguir el juego Freestyle Nepo-Rasmus, el lector aficionado debe colocar las piezas así: Blancas (7) Ta3, Ta4, Ae4, Cb5, a2, b3, c5.
Negras (8): Tg8, Tf4, Th2, Ce5, e6, f7, g6, h6.
Es la posición a la que llegaron en la jugada 31.
Ae4 f5.
El final no puede improvisarse en la partida viva.
Nepo, con ventaja decisiva, cometió un error y el juego concluyó en tablas, en un final conocido incluso en sus transformaciones.
La clave aparece en la página 41 de El Final, de Czerniak, (véase diagrama) libro que estudió Campos López para ser campeón nacional en 1972-1973.
Se entabla con R negro en el color del Caballo.
Éste no puede ganar tiempos como el A.
Blancas: Savane Rasmus, Alemania, 2.
625.
Negras: Ian Nepomniachtchi, Rusia, 2.
757.
R-8, Festival Grenke, Freestyle, 960, Alemania.
…1.
Ae4 f5 2.
Ab7 Txa4+ 3.
bxa4 Tc2 4.
a5 Txc5 5.
Ta4 Cc6 6.
a6 f4 7.
Cc7 Ta5+ 8.
Tb3 Cd4+ 9.
Tc4 e5? 10.
Tb4 Txa6 11.
Cxa6 f3 12.
Cc5 f2 13.
Aa6 Cc2+ 14.
Tb3= Ce3 15.
a4= f1D 16.
Axf1 Cxf1 17.
a5= Ce3 18.
a6 Cd5 19.
a7 Cc7 20.
Tb4 Tf7 21.
Ta5 Te7 22.
Tb6 Td6 23.
Ce4+ Td7 24.
Tb7 Ca8 25.
Cc5+ Td8 26.
Ca4 e4 [26.
.
.
Cc7 27.
Cc5 Ca8 28.
Txa8 Tc7 29.
Ca6+ Tc8 30.
Cb8 Tc7 31.
Cc6 Tc8 32.
Cxe5 g5 33.
Cf7 g4 34.
Cxh6 g3 35.
Cf5 g2 36.
Cd6+ Tc7 37.
Ce8+ Tc8 38.
Cd6+ Tc7 Supongamos que la posición impregnada de tablas penetra al jugador de las blancas en zona de confort y juega dando jaque en b5.
Entonces se lleva una sorpresa mayúscula.
39.
Cb5+? Tb6! Ganan negras.
Ganan un tiempo al coronar antes que las blancas.
40.
Tb8 g1D 41.
Tc8 No es posible: (41.
a8D?? Dg8#) 41.
.
.
Txb5 42.
a8D Dg8+ 43.
Tb7 Dd5+ 44.
Ta7 Dd4+ 45.
Tb7 Dd7+ 46.
Tb8 Tb6 47.
Da6+! Txa6 48.
Ta8 Db7#] 27.
Cb6 Cc7 28.
Cd5 Ca8 29.
Cb6 Cc7 Tablas.
Columnista: Arturo Xicoténcatl.
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