Absuelven a unos padres acusados de privar de comida a sus hijos: solo recibían un grano de arroz o una cuchara si la mesa no estaba puesta a tiempo Infobae

Se trata de una familia desestructurada. Dos de los niños son de la relación previa del padre mientras que el tercero es hijo del acusado. La custodia de los menores estaba compartida con los otros padres quienes asistieron al juicio como civiles. Vivían en condiciones de dudosa responsabilidad para con los menores. Desde febrero de 2022 la situación ya era inquietante. Según los testigos, el padre solía emborracharse desde por la mañana. La madre, por su parte, consumía drogas como cannabis, cocaína y alcohol con regularidad.

Además, solían discutir haciendo del entorno un ambiente aún más desfavorable. Los niños eran testigos de la hostilidad cotidiana en la que sus responsables legales desconectaban de sus obligaciones. La situación se agravó cuando empezaron a ser ellos las víctimas. Ya no solo era el contexto en el que vivían, las acciones imprudentes de sus padres también les estaban afectando.

¿Qué hizo saltar las alarmas?

Inmersos en una atmósfera asfixiante los niños empezaron a ser víctimas de las omisiones parentales. Eran castigados con mano dura. Si la mesa no estaba puesta a tiempo solo comían un grano de arroz o una cuchara.

Otra de las ofensas contra ellos era por parte de la pareja del padre. Uno de los menores relata como esta escupía en el pollo para impedir que lo comieran.

Fue gracias al Colegio de los menores que la situación se pudo controlar a tiempo. Cuando supieron lo que estaba pasando en el entorno doméstico de los niños fueron enseguida a reportarlo a las autoridades.

Según informa L´Eclaireur, el Tibunal de Saint-Nazaire juzgó a los progenitores el martes 3 de junio. Se les procesaba por omisión a sus responsabilidades parentales en las que se incluía la privación de alimento y el maltrato.

Sin embargo, a pesar de las declaraciones de los niños, los padres fueron absueltos por el tribunal debido a la falta de pruebas.

Reconocieron que habían consumido sustancias ilícitas delante de los menores y que eso podría haber causado importantes perjuicios y malestar en el desarrollo de su cotidianeidad.

Tras el análisis del caso el tribunal dictó sentencia. La condena ascendía a seis meses de prisión, con suspensión de la pena y el pago de 500 euros a cada uno de los tres menores por los daños ocasionados.

¿Qué otros aspectos debemos de tener en cuenta?

A pesar de la falta de pruebas, una mirada al historial criminal de los acusados -en concreto del padre- muestra como esta no era la primera vez que era llevado a juicio. Anteriormente ya había tenido problemas con la ley.

Mientras que esta era la primera entrada en el historial criminal de la madre, el historial del padre era de seis entradas.

Esto lleva a preguntarse sobre las condiciones en el hogar y en el desarrollo de los niños en un ambiente influenciado por el crimen y la imprudencia. Es importante, por ello, que la justicia trabaje por atender los casos de vulnerabilidad infantil y proteger ante todo a los menores frente a los posibles riesgos que pudiesen correr en el futuro.