Cómo es el nuevo sanatorio de alta complejidad de Nordelta orientado al cuidado integral del paciente Infobae
La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la calidad de la atención sanitaria como la capacidad de estos servicios para aumentar la probabilidad de resultados positivos en las personas y las poblaciones.
Esta calidad depende de conocimientos profesionales basados en evidencia. Los abordajes deben ser eficaces, seguros y centrados en las personas, además de oportunos, equitativos, integrados y eficientes.
En ese sentido, el jueves 12 de junio se inaugura el nuevo Sanatorio Swiss Medical Nordelta, un centro médico de 26.000 metros cuadrados diseñado íntegramente para responder a las demandas de la medicina de alta complejidad.
Con una infraestructura proyectada desde cero y equipada con tecnología de última generación, el edificio introduce un modelo de atención que busca integrar eficiencia clínica, espacios adaptados al entorno familiar y un seguimiento continuo de la experiencia del paciente.
Cada componente, desde la lógica arquitectónica hasta los sistemas técnicos de soporte, fue desarrollado para complementar los momentos de la atención médica. “Lo que buscamos es acompañar integralmente la experiencia de atención, internación o práctica quirúrgica, dándole al paciente y a su entorno una atención completa”, explicó el doctor Pablo Dimitroff, director médico del sanatorio, en diálogo con Infobae.
Una estructura pensada desde el plano para la asistencia
La arquitectura del edificio, ubicado en Avenida de los Lagos al 2485, no responde a una adaptación de estructuras previas: fue diseñada específicamente para la función sanitaria. Esta decisión permitió desarrollar recorridos diferenciados para pacientes, personal médico y acompañantes, lo que reduce la exposición innecesaria de quienes transitan situaciones clínicas delicadas. “Por ejemplo, un paciente en camilla no se cruza con familiares en salas comunes. Hay un trazado pensado para preservar esa intimidad”, detalló Dimitroff.
En total, el sanatorio fue diseñado con una capacidad inicial de 127 habitaciones distribuidas en distintas unidades que incluyen guardias, cirugía, traumatología, tocoginecología, obstetricia, pediatría, cuidados intensivos, entre otros. Estas áreas se pondrán en marcha de manera escalonada. La lógica de operación por etapas permite garantizar que cada sector funcione con los estándares de calidad definidos, tanto en su dimensión médica como en la experiencia de quienes lo transitan.
El edificio cuenta con una planta de diagnóstico por imágenes, un área de emergencias con acceso directo desde el exterior, una unidad de observación, y un conjunto de consultorios médicos que permiten sostener la atención ambulatoria y el seguimiento de los pacientes luego del alta.
Uno de los puntos sobresalientes es el entrepiso técnico, ubicado entre los pisos quirúrgicos, que permite acceder a instalaciones como gases medicinales o climatización sin interrumpir las intervenciones. Todas las habitaciones, incluidas las de cuidados intensivos, tienen luz natural directa, lo que permite a los pacientes conservar la noción del paso del tiempo durante internaciones prolongadas. Esto apoya no solo a la recuperación física, sino también psicológica.
“Queremos ofrecer una experiencia médica completa, desde el equipamiento hasta cada detalle que impacta en cómo una persona transita su atención”, señaló Facundo Belocopitt, vicepresidente del grupo Swiss Medical, al referirse al enfoque integral del nuevo sanatorio.
El lugar también incorpora un sistema informatizado de correo neumático, con estaciones distribuidas por cada piso, que conecta farmacia y laboratorio con los sectores asistenciales. “Es una solución que permite trasladar medicamentos y muestras sin demoras. Entre una unidad y la farmacia puede haber 300 metros. Con este sistema, eso se resuelve en segundos”, explicó.
El sistema se basa en una red de tubos que recorre todo el edificio y permite el envío automatizado de cápsulas selladas, dentro de las cuales se colocan insumos como muestras de laboratorio, medicación u otros elementos clínicos. Estas cápsulas, impulsadas por aire a presión, circulan entre estaciones ubicadas en cada piso y están controladas por un software que organiza el tráfico para evitar interferencias. “Todo está bien envasado y etiquetado, y el circuito permite que una muestra recorra largas distancias en pocos segundos sin intervención humana directa”, señaló Dimitroff.
El sanatorio cuenta, además, con un auditorio para conferencias, capacitaciones y reuniones clínicas, que funcionará como espacio de formación continua para el equipo médico y de enfermería. Este ámbito fue concebido para facilitar la actualización permanente del personal y favorecer el intercambio entre especialidades, integrando tecnología audiovisual y conectividad para transmisiones remotas.
Tecnología quirúrgica y diagnóstico de alta precisión
El centro quirúrgico incluye cuatro quirófanos, cuatro salas de procedimientos y boxes prequirúrgicos, todos diseñados con estándares técnicos rigurosos: pisos sin zócalos para facilitar la limpieza, lavabos y puertas con sensores de proximidad y acceso controlado a zonas estériles. Además de cirugía general, el sanatorio está preparado para intervenciones laparoscópicas, endoscopías y procedimientos ambulatorios con sedación.
En el área de diagnóstico por imágenes se instalaron tomógrafos multicorte, un resonador cerrado, ecógrafos y equipos de radiología digital. Se incorporaron en el resonador sistemas para mitigar el malestar en pacientes claustrofóbicos, como cielorrasos virtuales y juegos ópticos con espejos que simulan un entorno abierto.
La unidad cardiovascular, operada por el Instituto Cardiovascular de Buenos Aires (ICBA), aplica prácticas de hemodinamia ambulatoria a través del modelo que permite realizar procedimientos diagnósticos o terapéuticos sin requerir internación. “Ese enfoque permite que el paciente se recupere en un sillón y se vaya a su casa en el mismo día. Es menos solemne, más humano y más eficiente”, señaló Dimitroff.
Pediatría, partos y acompañamiento: diseño sensible para situaciones críticas
Uno de los pisos está destinado a la atención pediátrica, con sectores para internación general, observación, consultorios y terapia intensiva. Durante los meses de alta circulación viral se habilitan circuitos separados para niños con cuadros respiratorios, a fin de reducir el riesgo de contagios. Además, se prioriza el acompañamiento permanente y se habilitan recursos lúdicos como autitos eléctricos para traslados prequirúrgicos y camisolines con personajes infantiles. “La experiencia del niño mejora, y eso reduce el impacto emocional en los padres”, explicó el director médico.
En el mismo edificio se ubican las suites obstétricas, los quirófanos ginecológicos y una habitación especialmente acondicionada para parto respetado, equipada con bañera y mobiliario adaptado. Sin embargo, ese sector aún no se encuentra habilitado. “Vamos a tener prácticas en obstetricia y neonatología. Todavía no arrancamos con esto en la primera etapa, pero sí lo vamos a tener”, aclaró Dimitroff. La infraestructura está preparada y se incorporará a medida que avance el despliegue de servicios.
Las habitaciones del sanatorio, con excepción de las unidades de terapia intensiva, cuentan con una antesala diseñada para acompañantes. Este espacio permite que familiares o seres queridos puedan permanecer cerca durante la internación, sin interferir con la atención médica ni comprometer la privacidad del paciente. En el caso de las habitaciones pediátricas, se encuentra incorporado un mueble empotrado que se transforma en cama para que los padres puedan descansar con comodidad cerca de sus hijos.
Además, no existe un horario restringido de visitas. El modelo de cuidado contempla la presencia permanente de los acompañantes, tanto en áreas pediátricas como de adultos, siempre que las condiciones clínicas lo permitan. Esta decisión busca humanizar la internación y facilitar el vínculo entre paciente y entorno afectivo.
Más allá de lo clínico: la experiencia como dimensión de cuidado
La propuesta no se limita a lo estrictamente médico. El entorno fue pensado para acompañar la estadía de quienes atraviesan procesos de salud simples y ambulatorios, o complejos y prolongados. Los pacientes reciben platos elaborados por el chef Fernando Trocca, en coordinación con el equipo de nutrición del sanatorio. Las áreas comunes, como salas de espera, confitería y estaciones de trabajo, fueron pensadas también para los acompañantes, con calefacción, ambientación y hasta aromatización para crear un ambiente lo más confortable posible.
“La experiencia que vive un paciente está atravesada por lo que vive su familia. Por eso trabajamos desde hace años escuchando qué funciona y qué se puede mejorar”, señaló Carlos Iacono, encargado de experiencia del usuario. “Cada detalle, desde la iluminación hasta la vajilla, tiene un propósito. Nada fue elegido al azar”, agregó.
Además, el sistema monitorea en tiempo real los niveles de satisfacción. “Sabemos si una persona tuvo una buena experiencia, si tuvo demoras, si hubo algún problema. Esa información nos permite corregir rápido. Todos los que trabajamos acá somos responsables de que eso funcione”, explicó Belocopitt a Infobae.
Un modelo operativo en desarrollo progresivo
Con este sanatorio, Swiss Medical contará con 11 centros médicos de estas características en el país. Fue diseñado con capacidad para 127 habitaciones, pero su apertura será progresiva. El despliegue de servicios se organiza por etapas para garantizar que cada unidad funcione con el nivel técnico y humano requerido. Inicialmente, la atención será para afiliados de Swiss Medical, aunque se prevé que con el tiempo se sumen otras modalidades de acceso.
“La estructura es grande, pero no se habilita todo de golpe. Vamos paso a paso para asegurar calidad en cada tramo”, indicó Dimitroff. Según datos internos, el sanatorio contará con más de 1.500 trabajadores una vez en pleno funcionamiento, incluyendo médicos, enfermeros, técnicos, personal de mantenimiento y operadores de sistemas. También se integrarán consultorios externos para la atención ambulatoria y el seguimiento de pacientes dados de alta.
Además de la apertura por etapas, el proyecto contempla futuras ampliaciones edilicias en el mismo predio, con el objetivo de incorporar nuevas áreas asistenciales y complementar los servicios existentes a medida que crezcan las necesidades de atención.
“El edificio impresiona, pero lo esencial está en cómo se transita una atención médica. En eso estamos enfocados”, resumió Belocopitt. “La arquitectura es parte de una experiencia, pero lo central sigue siendo que el paciente se sienta cuidado. Y eso es lo que buscamos desde el primer día”, planteó.
