Un niño de 9 años fue detenido por agentes de ICE y podría enfrentar deportación a Honduras Infobae
El caso de Mártir García Lara, un niño de 9 años detenido junto a su padre por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas de Estados Unidos (ICE, por sus siglas en inglés), ha generado una ola de indignación en la comunidad de Torrance, California.
Según informó el Los Ángeles Times, ambos fueron arrestados el pasado 29 de mayo tras presentarse en un tribunal de inmigración en el centro de Los Ángeles.
Posteriormente, fueron trasladados a un centro de detención en Dilley, Texas, con planes de deportarlos a Honduras, su país de origen.
La comunidad estudiantil le brindó apoyo al menor arrestado
El menor, estudiante de cuarto grado en la Escuela Primaria de Torrance, dejó de asistir a clases de manera repentina, lo que despertó preocupación entre sus maestros y la comunidad escolar.
La Asociación de Padres y Maestros (PTA) de la escuela envió una carta solicitando a los residentes que contactaran a funcionarios electos para apoyar al niño y a su familia. Ria Villanueva, voluntaria de la PTA, expresó al medio que la situación ha conmocionado a toda la comunidad, destacando que en la escuela tratan a cada niño como si fuera propio.
La situación legal de ambos se complicó tras sus antecedentes migratorios
De acuerdo con ICE, el padre del menor, Mártir García Benegas, de 50 años, ingresó a Estados Unidos el 10 de julio de 2021 junto con su hijo.
Sin embargo, un juez de inmigración ordenó su deportación el 1 de septiembre de 2022. Aunque García Benegas apeló la decisión en agosto de 2023, esta fue desestimada, y ambos permanecieron en el país sin cumplir la orden de salida.
Según un portavoz de ICE, la detención se produjo tras su comparecencia en el tribunal, donde agentes federales vestidos de civil los arrestaron para iniciar un proceso de deportación acelerada.
El arresto de este niño ha sido parte de una serie de medidas migratorias de alto perfil implementadas recientemente como parte de las nuevas políticas de inmigración del gobierno.
En los últimos días, agentes de inmigración llevaron a cabo redadas en diversos lugares, incluyendo un restaurante en San Diego y un club nocturno en Los Ángeles, lo que ha generado enfrentamientos con residentes y defensores de los derechos de los inmigrantes.
Mártir y su padre permanecen en un centro de detención
El Distrito Escolar Unificado de Torrance confirmó estar al tanto de la situación, aunque no pudo proporcionar detalles adicionales debido a la privacidad del estudiante. En un comunicado, la portavoz del distrito, Sara Myers, aseguró que están en contacto con familiares y autoridades para comprender mejor el caso y garantizar el bienestar de todos los estudiantes.
El centro de detención donde se encuentran Mártir y su padre, operado por la empresa privada CoreCivic, tiene capacidad para 2.400 personas y se presenta como un centro residencial familiar.
Aunque estuvo inactivo en agosto de 2024, reanudó sus operaciones a principios de este año. No se ha confirmado si padre e hijo cuentan con representación legal en este momento.
La detención de inmigrantes en los juzgados se ha convertido en una táctica recurrente
Según el Los Ángeles Times, agentes federales han estado arrestando a personas tras sus comparecencias programadas ante jueces de inmigración, lo que ha generado temor entre las comunidades inmigrantes.
En muchos casos, los detenidos no tienen antecedentes penales y cumplen estrictamente con las órdenes del gobierno, lo que ha llevado a defensores de los derechos de los inmigrantes a criticar estas prácticas.
Melissa Shepard, directora de servicios legales del Immigrant Defenders Law Center, señaló que estas acciones están causando confusión y miedo entre las familias inmigrantes. Por su parte, Jorge Mario Cabrera, portavoz de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes, afirmó que estas tácticas están desalentando a las personas a asistir a sus audiencias judiciales, lo que podría tener consecuencias graves para sus casos.
En California, donde la mitad de los 9 millones de niños forman parte de familias inmigrantes, la mayoría de las cuales son ciudadanos estadounidenses, este tipo de situaciones genera una preocupación creciente.
