Opinión
La elección judicial perfectible; ensayo y error = aprendizaje Periódico Correo
Los mexicanos tenemos el valor y la inteligencia, para hacer lo que sea necesario, hasta lograr que nuestro país progrese, máxime si se trata de profesionistas, destacados, estudiados, con un cúmulo de experiencia, como son los candidatos a ministros, jueces y magistrados.
Entendemos lo doloroso que es tener que cambiarse, dejar la toga, y salir a buscar trabajo, con tan buenos sueldos, como los que actualmente tienen en el poder judicial; pero nadie les dijo que tenían escriturados para la eternidad sus nombramientos, ni que estos fueran hereditarios en su nepotismo. Hoy la mayoría de los mexicanos se gana la vida, el día a día, sin las prerrogativas que gozan los integrantes del poder judicial, en salarios mínimos, sin prestaciones, aguantando los paros, las pandemias, sin tener asegurada la quincena, de esa manera, sin los privilegios, sin los sueldos, ni las prestaciones con las que hasta ahora habían disfrutado en el poder judicial, tal vez eso es lo que duele. Pero si hubieran tenido un poco de autocrítica, capacidad de auto reformarse, más humildad, si no se hubieran preocupado más por sus haberes de retiro, que, por la defensa de los derechos humanos y laborales de los justiciables, si no les hubieren desechado tantas demandas de amparo por improcedentes; no tendríamos que estar llevando a cabo esta reforma tan profunda al poder judicial.
Debemos entender el momento presente, el 1º de junio, los ciudadanos han ejercido el derecho, y están aprendiendo a elegir a sus ministros, magistrados y jueces; así como eligen a sus gobernantes, debemos respetar la voluntad popular, la etapa actual de la instrumentación, y ejecución de la REFORMA JUDICIAL DEL PODER JUDICIAL, Priorizando la seguridad y la paz pública, la justicia.
La Reforma Judicial, ya fue aprobada en septiembre del 2024. Por el poder constituyente, esa es una verdad legal, es cierto esta REFORMA, entraña un gran cambio, una revolución completa en el Poder judicial; disminuyo el número de ministros de 11 a 9,
- Esta reforma establece que los jueces y magistrados sean elegidos mediante voto popular. Esta medida busca involucrar más a la ciudadanía en la selección de los funcionarios judiciales. Aumentar la transparencia y la rendición de cuentas en el Poder Judicial.
- Esta elección extraordinaria del 1º de junio de 2025 para renovar las magistraturas, ya que la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) con una reducción de 11 a 9 ministros. Esta medida implicará un cambio significativo en la composición del máximo tribunal del país.
- Se establece un nuevo órgano encargado de investigar y sancionar las faltas cometidas por los integrantes del Poder Judicial.
- Se modificaron los requisitos para acceder a cargos en el Poder Judicial. Para ello, se introducirán nuevos criterios como el promedio académico y la experiencia profesional, y eliminando restricciones como la edad mínima.
- Se implemento la paridad de género en las candidaturas para cargos judiciales, buscando asegurar una representación equitativa entre hombres y mujeres en el sistema judicial. Además, la duración en su cargo pasará de 15 a 12 años.
- Se establece que los mandatos judiciales de magistrados y jueces duren nueve años, con la posibilidad de reelección consecutiva. Ello podría influir en la estabilidad de las funciones judiciales.
- La reforma otorga mayor autonomía a esta institución, con el objetivo de mejorar la formación y evaluación de los futuros jueces y magistrados.
Recordemos que el Estado es la forma política que reivindica el monopolio de la coacción, la fuerza legítima a costa de otros sectores sociales. El monopolio estatal de la fuerza que se ejerce a través de uno de sus elementos de GOBIERNO; que está resultando insuficiente para cubrir todo su territorio, para combatir a la criminalidad, con zonas donde es desafiado por poderes facticos (económicos, religiosos, o organizaciones criminales delincuenciales). Que compiten con la autoridad estatal, incluso la substituyen o suplantan, conocidas como áreas marrones. En estas condiciones, el estado se convierte en uno más de los actores políticos que pierde protagonismo. Y debe ser fortalecido por los ciudadanos y los demás poderes.
Quienes ahora son electos para integrar el PODER JUDICIAL, no llegan a dar un paseo por las nubes, van a enfrentar con sus sentencias y sanciones, a los criminales. La teoría de la división de poderes surge para equilibrar los poderes del estado, como un sistema de pesos y contrapesos, donde el poder judicial es clave para evitar los abusos del ejecutivo, y el legislativo. Los Estados democráticos fincan su funcionamiento en la toma de decisiones en las elecciones. Es ahí donde los ciudadanos enfrentan los grandes retos.
La inédita elección judicial, no nos ha satisfecho, debemos trabajar para mejorarla, hacer las correcciones y mejoras necesarias, asumir las responsabilidades de casa uno de los actores, tanto los opositores boicoteando la elección, como de los organizadores, pero sin duda alguna de los ciudadanos. Quienes finalmente tendrán que soportar el peso de las decisiones.
Esta elección ha sido histórica para México, no solo por la baja votación alcanzada; sino por que es la primera ocasión en que los ciudadanos pueden votar para elegir a sus Jueces, Magistrados y Ministros. Es claro que debe perfeccionarse. Mientras tanto debemos ser vigilantes permanentes y despiertos para denunciar aquellos actos que no se apeguen a la legalidad.
