Venezuela reitera su solidaridad con Palestina al cumplirse 77 años de la Nakba Infobae
Caracas, 15 may (EFE).- El Gobierno de Venezuela reiteró este jueves su solidaridad con Palestina al cumplirse 77 años de la Nakba (catástrofe, en árabe), que conmemora la expulsión forzosa o la huida de sus tierras de unos 700.000 palestinos -la mayoría de la población de preguerra- debido a la acción de milicias judías en la guerra árabe-israelí de 1948.
"Aquel crimen histórico no ha cesado: sus consecuencias trágicas persisten hasta nuestros días, hoy agravadas por un genocidio en curso, ejecutado con brutalidad por el régimen nazi de Israel y su principal responsable, el criminal de guerra Benjamín Netanyahu", señaló la Cancillería venezolana en un comunicado publicado en Telegram.
Igualmente, dijo que la Nakba no es un "recuerdo del pasado, es una herida abierta que sangra en cada acto de agresión, con cada niño asesinado, con cada hogar destruido, con cada vida palestina segada por la maquinaria de guerra, apartheid y ocupación del Estado de Israel".
"Su resistencia heroica es fuente de inspiración para los pueblos libres del mundo y su legítimo anhelo de justicia, paz y soberanía es un clamor que hacemos nuestros, con la convicción de que más temprano que tarde, la libertad y la dignidad florecerán para siempre en la tierra sagrada de Palestina", añadió.
Miles de palestinos participaron este miércoles en una marcha convocada en la ciudad cisjordana de Ramala para recordar la Nakba y al tiempo denunciar la situación que se sigue viviendo en la devastada Franja de Gaza, bajo fuego israelí desde hace más de 19 meses.
Además, durante este miércoles las alarmas antiaéreas sonaron 77 segundos en diferentes ciudades palestinas de la Cisjordania ocupada, en referencia al número de años transcurridos desde el inicio de la Nakba.
También cerca de 200 estudiantes palestinos e israelíes se manifestaron este miércoles cerca del campus de la Universidad de Tel Aviv por la Nakba, pese a que el martes el ministro de Educación israelí, Yoav Kish, amenazó con cortar la financiación a las universidades que permitan este tipo de actos. EFE
