Derriban a Kipchoge Excelsior

Quemante tiempo en el maratón en una época dominante en la simbiosis del esfuerzo y de la tecnología; generado el impactante proceso evolutivo acaso, más por ésta.
El fascinante récord mundial de 2 horas 00’35” señalado por el atleta keniano Kelvin Kiptum, de 23 años, este domingo en Chicago, no sólo derriba del pedestal mundial a su compatriota Eliud Kipchoge, de 38, una máquina devoradora de kilómetros iluminada de éxitos, sino que marca un momento revolucionario en la historia del atletismo: Eliud Kipchoge necesitó de 20 años de esfuerzos y una veintena de carreras para alcanzar la cumbre del Everest del maratón y Kelvin Kiptum ¡empleó menos de 10 meses! y apenas tres maratones para superarlo y cambiar un gajo de historia.
Con la hermosa perspectiva potencial de mejorar aún más el RM en el momento de decidir su presencia en el circuito más rápido del mundo: Berlín.
Las ideas, con el suceso deslumbrante, corren en tropel: Hipotéticamente, Kelvin Kiptum tendrá ocho años menos de edad que Kipchoge en sus terceros Juegos Olímpicos….
Desde que Kiptum corrió en Valencia el pasado 4 de diciembre en 2:01’53” se levantó una interrogante razonablemente deportiva que abrió una fisura en los dos objetivos supremos de Kipchoge: los tres oros olímpicos y reventar el muro de las dos horas bajo las reglas oficiales.
El mundo del atletismo vive la euforia del momento estelar.
Los récords mundiales, sin duda, tienen límites.
Aún así desde los albores de los 90 cuando Moses Tanui corrió el medio maratón en poco menos de una hora, o tal vez mucho antes quizás por los 60 o 70 —allá por la década de los 40 y 50 se preveía que los nadadores cruzarían el muro de los 15 minutos en los mil 500 m nado libre, así lo expresó el legendario Bob Kiputh entrenador de los Peces Azules de la Universidad de Yale; no como ilusión, sino como una razonada reflexión sustentada en los descubrimientos de la fisiología y la técnica como soporte en la incorporación científica en los entrenamientos.
¿Habrá alguien que crea imposible que la mujer rompa los 50’’ en los 100 m nado libre, como lo hizo Jim Montgomery en Montreal 76? En la esfera acuática, no—, se percibió la probabilidad de la ruptura de la mítica frontera de las dos horas; sin considerar en aquellos tiempos, el empuje sideral que le iba a dar la tecnología actual con las zapatillas mágicas, ultraligeras, que por otra parte han fracturado, de alguna manera, la piedra angular de la competencia, hacerlo en igualdad de circunstancias.
No todos los atletas poseen la capacidad económica para comprarlas.
Kiptum corrió en parciales negativos 1 hora 00’48 la primera mitad y 59’47” la segunda parte.
Con algo extra, antes de entrar en el punto incandescente del maratón, en la quemante zona de la fatiga de los 35 kilómetros, en los que la mayoría se funde, ¡aceleró! Corrió los 5 Km de los 30 a los 35 en 13’51” y los 10 Km de los 30 a los 40 en 27’52”.
Corrió a un promedio de 2’51”467/100 cada kilómetro.
 Columnista: Arturo XicoténcatlImágen Portada: Imágen Principal: Send to NewsML Feed: 0