Y ahora a prepararnos para el cuarto repunte El Financiero

Esta es una de las razones -además de traer los astros alineados para la gran candidatura en 2024- por la cual la jefa de Gobierno de la Ciudad de México (CDMX), Claudia Sheimbaum, está de plácemes, de buen humor, feliz y apareciendo en los eventos políticos más importantes de todo el país.

Un asunto importante: el lunes 25 de octubre inició la vacunación anti Covid para menores de edad con comorbilidades, entre 12 y 17 años, lo cual, como dijimos antes en este espacio, es buena noticia, pero no es suficiente.

Recordemos que nuestra agencia sanitaria, la Comisión Federal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Cofepris), aprobó la vacuna anti Covid de Pfizer/BioNTech para este grupo etáreo desde el pasado 24 de junio. Esta autorización de la Cofepris se dio a los 45 días de que en Estados Unidos la Food & Drug Administration (FDA) informara que podía aplicar su vacuna Pfizer-BioNTech en mayores de 12 años.

Sin embargo, como sabemos, la vacunación anti Covid para menores de edad no ha estado exenta de polémica, sobre todo por los dichos y hechos de “los dos López”: Andrés Manuel López Obrador y Hugo López-Gatell, presidente de México y subsecretario de Salud, respectivamente, quienes han dicho en todos los foros posibles que esta inmunización “no es necesaria”, además de que “no hay evidencia científica”, a pesar de que otros países ya han aplicado la vacuna a sus adolescentes de 12 a 17 años.

El otrora vocero de la gestión de la pandemia en México, López-Gatell, resaltó que “no hay evidencia científica de que se requiera vacunar a niños, de que se requieran dosis de refuerzo o que haya una especial preocupación porque sean más virulentas las variantes, ni siquiera la variante Delta”.

Aún así, el gobierno aceptó a regañadientes la vacunación anti Covid, pero solo para adolescentes con comorbilidades, lo cual significa inmunizar a alrededor de un millón 300 mil niños de ese grupo etáreo. En otras palabras, este grupo representa solo el 10% del total de adolescentes mexicanos de ese rango de edad.

Y es que a decir del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), en el país existen alrededor de 13 millones de mexicanos que tienen entre 12 y 17 años, por lo cual con la vacunación anti Covid para este grupo de edad solo cubriría a alrededor del 10% de este conglomerado.

En realidad, esta negativa puede leerse desde dos ángulos: por un lado, la vacuna de Pfizer / BioNTech, ha tenido mucha demanda y ha hecho varios ajustes en su producción, pero ha tenido problemas en sus entregas en todo el mundo, donde México no es la excepción. Pero por otro lado, también está la explicación económica, porque tener vacuna anti Covid para 13 millones de adolescentes, indicada para dos dosis, implica comprar al menos 26 millones más de vacunas de “la farmacéutica de la pastilla azul”, que es la única autorizada para este conglomerado, con el gasto consecuente.

Con sus malos dichos y hechos sobre la vacunación anti Covid para este grupo etáreo, el gobierno olvida que la pandemia de Covid-19 ha matado a lo largo de año y medio a alrededor de 800 adolescentes de entre 12 y 17 años, por lo cual no debería tomarse tan a la ligera. Es más, bastaría una sola muerte para poner cartas en el asunto.

Empero, para cumplir con el derecho a la salud, como mandata la Carta Magna, y no caer en un acto francamente discriminatorio, el gobierno de la República debería abrir la vacunación anti Covid a todo este grupo etáreo, de 12 a 17 años, y después, a los niños de entre cinco y 11 años, como ya está ocurriendo en otras latitudes: Chile, Cuba, China, El Salvador y los Emiratos Árabes Unidos han aplicado ya vacunas anti Covid para niños más pequeños. Estados Unidos también está próximo a empezar la respectiva vacunación para este grupo etáreo.

Regresando a la vacunación anti Covid para menores de edad: esperemos que al menos una vez prive la cordura de parte de este gobierno de la 4T, sobre todo para proteger a los adolescentes y niños, y que cese el caudal de amparos, así como el estrés crónico de los angustiados padres de familia.

Ver todo con una lógica electoral, en vez de apegarse a lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud (OMS) y el ámbito científico, con respecto a la pandemia, hace tomar muchas decisiones sanitarias erróneas a la presente administración, como es justo ésta, la de negar la vacunación a los menores de edad.

El Botiquín

Algo debemos hacer como país para detener la violencia contra los menores de edad. Negar la vacuna anti Covid a menores de edad es una evidente violencia de parte de nuestros gobernantes, al igual que la falta de medicamentos oncológicos para niños con cáncer, pero normalizar algo tan aberrante, como la “venta” de niñas en ciertos estados y comunidades y hasta justificarlas, rebasa al mejor guión de cualquier plataforma en streaming.