CMAS, la caja chica de Nicolás Reyes Plumas del Golfo

ABRIENDO BRECHA   Andrés Rodríguez Cabrera   Siempre será pertinente recordar que fue gracias a los 14 ediles de la anterior administración municipal del ayuntamiento de Minatitlán (2014-2017), presidida por Héctor D.
Cheng Barragán, el haber recuperado el servicio de agua potable, drenaje, alcantarillado, tratamiento y disposición de aguas residuales, con la controversia constitucional No.
151/2016 ganada ante la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN).
  Comisión del Agua y Saneamiento (CMAS) que, reitero por enésima vez, a través de un decreto legaloide se llevó al gobierno del estado el corrupto ex gobernador Fidel Herrera Beltrán y la convirtió en Comisión del Agua del Estado de Veracruz (CAEV), con la complacencia de su protegida y corrupta ex alcaldesa Guadalupe J.
Porras David y sus 13 ediles (2008-2010); servicio de agua y saneamiento que no quisieron devolver los también corruptos ex gobernadores, Javier Duarte de Ochoa y Miguel Ángel Yunes Linares, y los anteriores congresos locales.
  Recordemos que, los ex gobernadores antes citados prefirieron mantener una costosa plantilla laboral y de aviadores en Xalapa, que aplicar los más de 8 millones de pesos de ingreso mensual en el mantenimiento preventivo y correctivo del servicio del agua y saneamiento de las minatitlecas y minatitlecos.
  Después de varios exhortos y/o mandatos emitidos por la suprema corte, el gobernador por Morena Cuitláhuac García Jiménez aceptó a regañadientes que su director de la CAEV, Félix Jorge Ladrón de Guevara Benítez, la devolviera o transfiriera al ayuntamiento de Minatitlán que preside el morenista Nicolás Reyes Álvarez, el pasado 15 de julio.
  Desde esa fecha, Nicolás Reyes administra ilegalmente y da el servicio de agua potable y saneamiento a más de 140 mil usuarios– percibiendo un ingreso anual de más de 95 millones de pesos -a través del jubilado de Pemex y director del mal llamado “organismo operador del agua potable”, Daniel Díaz Torres.
  Organismo donde el pago mensual, entre la nómina de los más de 220 trabajadores de los sindicatos de la CMAS y CAEV, y demás gastos, no rebasa los 3 millones y medio de pesos, y queda un pasivo de 4 millones y medio de pesos; recurso que dispone a su antojo el alcalde Nicolás Reyes, pese a la inconformidad y reclamo legal de algunos ediles.
  Ahora que el servicio del agua y saneamiento la administra –ilegalmente- el gobierno municipal, algunos ediles le sugirieron al alcalde Nicolás Reyes bajara en un 20 o 30 por ciento la cuota mensual, nada más rebuznó y ni tomó en consideración que el servicio que presta no reúne los requisitos que exigen las normas de calidad; en pocas palabras, también le valió madres la difícil situación económica por la que atraviesan los habitantes de Minatitlán.
  Muchas familias se quejan ante las oficinas que dirige Daniel Díaz, porque al detectar fugas en sus tomas de agua, además de cobrarles la reparación, les exigen dinero para adquirir el material que ocuparán en la misma; argumentando que el “organismo operador del agua” no tiene recursos para comprarlos.
Entonces, en qué está utilizando Nicolás Reyes los 4 millones y medio de pesos que quedan cada mes por el servicio de agua y saneamiento.
  Por qué ahora reitero, trillo, y hasta fastidio, como lo hice durante años al escribir sobre la urgente municipalización del servicio del agua y saneamiento de Minatitlán –fundamentado en el Artículo 115 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos-, que Nicolás Reyes está violentando el Reglamento Municipal de Agua Potable, Drenaje, Alcantarillado, Tratamiento y Disposiciones de Aguas Residuales 1, publicado en la Gaceta Oficial el viernes 7 de septiembre de 2007, porque en sus principales artículos y literales indica textual:   CAPÍTULO SEGUNDO, de sus Atribuciones: Artículo 6.
Para el desempeño de sus funciones, la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento y en coordinación y bajo la supervisión del Ayuntamiento a través del Edil encargado de la función y/o servicio tendrá las siguientes atribuciones:   CAPÍTULO TERCERO, de su organización: Artículo 7.
La administración de los servicios de agua potable, drenaje, alcantarillado, tratamiento y disposición de aguas residuales estará a cargo de:   I.
Un Consejo de Administración II.
Un Director General   Artículo 8.
El Consejo de Administración del Organismo y el Director General, serán designados por el Ayuntamiento a propuesta del Presidente Municipal y estará integrado de la siguiente forma:   I.
Un Presidente, que será el Presidente Municipal; II.
Dos representantes del H.
Ayuntamiento, uno de los cuales fungirá como Vicepresidente a designación del H.
Ayuntamiento, para suplir en sus ausencias al Presidente; y que recaerá en el Edil que tenga a su cargo la función o servicio de Agua Potable y Alcantarillado.
III.
Tres vocales, que nombrarán a propuesta de las organizaciones vecinales, comerciales, industriales o de servicio, que sean usuarios del servicio, en caso de que así se requiera, por la complejidad de los trabajos que realice el Organismo, se podrán aumentar en igual número los Consejeros a que se refieren las Fracciones II y III que anteceden.
  Vuelvo a insistir, el alcalde Nicolás Reyes no quiere presentar el citado Reglamento en Cabildo para que sea aprobado y enviado al Congreso del Estado, donde harían lo propio para que la paramunicipal sea autónoma y se sujete a los lineamientos legales de operación.
  El pasado lunes, funcionarios de la Secretaría de Infraestructura y Obra Pública (SIOP) del gobierno del estado, y el igual de soberbio y necio Nicolás Reyes, dispusieron de casi 20 millones de pesos para “parchar” mil metros de la Avenida Justo Sierra, según ellos, en un plazo de 90 días.
  Si a los 20 millones de pesos le sumamos 13 millones y medio de pesos, por tres meses del cobro del servicio del agua, tendrían 33 millones y medio de pesos para hacer una verdadera obra de impacto social que beneficie por más de 40 años a las familias que viven y comercian en la citada avenida, que es el principal acceso al centro de Minatitlán; obra que consistiría en cambiar tuberías del drenaje y agua potable que tienen más de 45 años de uso, así como rehabilitar guarniciones, banquetas y demás.
  Pero la cabeza del alcalde morenista Nicolás Reyes –porque todo indica que carece de cerebro- no le da para hacer verdaderas obras de beneficio social, o es probable quiera seguir teniendo como caja chica el cobro del servicio de agua potable y saneamiento; como en los mejores tiempos del PRI lo hicieron sus alcaldes de Minatitlán con el ex tinto y ex director de la CMAS, Jaime Arteaga Fernández.
  Si Pitágoras no se equivoca, el alcalde Nicolás Reyes estaría “jineteando” más de 100 millones de pesos por el cobro del servicio del agua, durante el 2020 y 2021, si persiste en su necedad de no permitir se integre el Consejo de Administración de la Paramunicipal; encargada legal de administrar los más de 95 millones de pesos que se recaudan anualmente por el multicitado servicio.
  Da pena ajena ver que el ahora deshonesto Nicolás Reyes – necio siempre ha sido- ya se le olvidó que en su toma de protesta juró respetar y hacer respetar la constitución del país, y las leyes que de ella emanen.
  (1) http://www.
ordenjuridico.
gob.
mx/Estatal/VERACRUZ/Municipios/Minatitlan/10Regagua.
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