Cómo los rasgos culturales y la gastronomía definen las nuevas experiencias urbanas Infobae

La Ciudad de Buenos Aires es uno de los destinos más cosmopolitas de América Latina. Reconocida como un punto de encuentro de culturas, es una ciudad que destaca por su mezcla de tradiciones y modernidad. En cada rincón, desde sus avenidas arboladas hasta sus barrios con arquitectura de diversas épocas, se percibe una energía que invita a explorar. Con su oferta cultural, gastronómica y artística, es un lugar donde conviven influencias europeas, latinoamericanas y locales.

En este ecositema, tanto los hoteles como restos y bares, están adoptando un papel más proactivo al posicionarse no solo como lugares de alojamiento o gastronomía, sino también como auténticos embajadores de la ciudad. La clave de esta tendencia, conocida como hiperlocalización, busca integrar distintos lugare en el tejido cultural del destino. Cada propuesta gana, justamente, por ofrecer una experiencia más auténtica. Conectar con el lugar es la cuestión.

“Recoleta y Retiro se convirtieron en epicentros de una Buenos Aires que evoluciona sin perder su elegancia. Hoy, el turista busca algo más que postales: quiere vivir experiencias auténticas, con identidad y narrativa”, reflexiona a Infobae Seba García, fundador y director creativo de Presidente Bar Buenos Aires y Miami. Sobre este rincón de la ciudad, distintos platos y tragos de autor, delinean un verdadero mapa de sentidos.

Reflejo cultural

Aquí, los viajeros pueden encontrar desde plazas históricas, como la Plaza San Martín, hasta una vida cultural que incluye teatros, galerías de arte y tiendas que exhiben el diseño local. Este contraste, que define el barrio, se refleja ahora en la manera en que las ofertas turísticas del área buscan conectarse con los visitantes a través de experiencias que van más allá de la simple hospitalidad.

La cultura porteña es un entrelazado de influencias europeas y de inmigrantes de todo el mundo, lo que crea una identidad única, cargada de diversidad y riqueza.

Desde el tango, que se baila en las milongas hasta los sabores intensos de la parrilla argentina, pasando por la tradicional cultura del café, Buenos Aires es una ciudad que invita a ser explorada siempre.

El Museo Nacional de Bellas Artes, es sin dudas un lugar que llama a los turistas (y no turistas) y exhibe una vasta colección de arte argentino e internacional. El Museo de Arte Latinoamericano de Buenos Aires (MALBA), reconocido por su enfoque en el arte moderno y contemporáneo de América Latina. También están cerca el Museo de Arte Moderno de Buenos Aires (MAMBA) y el Museo de la Ciudad, que ofrecen una variedad de exposiciones y actividades culturales, permitiendo a los huéspedes explorar la riqueza artística de la capital.

Lugares emblemáticos como el Obelisco, símbolo de Buenos Aires, y la Avenida 9 de Julio, conocida por su amplitud y su intensa actividad, son parte de este lugar visitado miles de turistas año a año.

Gastronomía que despierta los sentidos

Ubicado en pleno corazón de Buenos Aires, Buono Italian Kitchen aparece como una opción que no solo se distingue por su oferta gastronómica, sino también por su enfoque inclusivo y accesible. Ubicado en el Sheraton Buenos Aires Hotel & Convention Center se posiciona como un punto estratégico tanto para turistas, viajeros y los propios ciudadanos.

A solo unas cuadras, los huéspedes pueden disfrutar de la Plaza San Martín, un espacio verde que combina tranquilidad con una rica oferta gastronómica y monumentos históricos.

Son muchas las personas que eligen a veces concurrir al hotel solo para aprovechar las ofertas gastrónómicas. Este es el caso de Buono. Si bien la cocina italiana es famosa por su tradición y calidad, la nueva carta otoño-invierno de este restaurante da un paso más allá al fusionar lo mejor de la gastronomía italiana con un fuerte compromiso con la sustentabilidad.

Así, la experiencia gastronómica se transforma en una celebración de la frescura de los productos locales, la trazabilidad de los ingredientes y el disfrute consciente de cada bocado.

Con más de 40 platos que combinan clásicos italianos con innovadoras creaciones pensadas para el clima frío, los risottos, pastas artesanales y carnes se presentan en versiones cuidadosamente adaptadas para realzar los sabores propos de la estación.

“Esta nueva carta busca rescatar lo mejor de la cocina italiana, pero adaptada a lo que la estación nos brinda”, comenta Infobae Matías Lorenzo, chef ejecutivo del restaurante. Entre los platos más destacados se encuentran los Agnolotis di manzo, rellenos de osobuco, servidos con su jugo de cocción y gírgolas grilladas. Este plato, de gran riqueza en sabores, es una de las nuevas incorporaciones de la carta que no puede pasar desapercibida para los amantes de la buena mesa.

Otro plato que promete conquistar paladares es el risotto di barbabietola rossa, ideal para comenzar la comida con un toque de frescura y color, aprovechando los productos de estación como la remolacha. Y para cerrar esta experiencia gastronómica, el tradicional tiramisú italiano se presenta como un clásico infalible, una verdadera alegría para quienes buscan la autenticidad del postre italiano por excelencia.

Un aspecto nuevo que acompaña la renovación de la carta es la inclusión de un maridaje exclusivo con vinos orgánicos de Mendoza. Esta especial de vinos ha sido cuidadosamente elegida para complementar los sabores de la nueva selección gastronómica, brindando una experiencia integral que resalta las cualidades tanto de los platos como de los vinos.

Con cinco o seis opciones de vinos orgánicos certificados, los comensales pueden disfrutar de etiquetas representativas de la vitivinicultura local, conocidas por sus prácticas responsables y alineadas con el respeto por el medio ambiente.

Puerto Madero, uno de los barrios más modernos y exclusivos de Buenos Aires, amplía en esta zona las opciones de entretenimiento y gastronomía. En este lugar se encuentran restaurantes de alta gama, bares de lujo y propuestas culinarias que abarcan desde cocina internacional hasta sabores tradicionales argentinos.

Además, circuito alberga el icónico Puente de la Mujer, diseñado por el arquitecto Santiago Calatrava, que no solo es un símbolo de la arquitectura contemporánea de la ciudad, sino también un lugar ideal para paseos junto al río.

Para quienes gustan de disfrutar un rasgo distintivo refleje el sentir porteño, un show de tango ofrece además una experiencia gastrómica especial.

“Tenemos un menu variado de platos clásicos a los cuales les imprimos la impronta del lugara, donde sin dudas la principal protagonista es la carne argentina. Se puede comer desde el clásico bife de chorizo de 400 gramos a la parrlla hasta una carne braseada 8 hs con perfume de hierbas y vino malbec”, destacan desde Madero Tango.

Y suman: “Pero como no todo es carne, en nuestra carta contamos con platos vegetarianos, veganos, que no contienen tacc en su elaboracion, risottos, pastas, de elaboracion propia y variedad de postres comenzando por los clasicos flan y budin de pan, pasando por postres frutales, de chocolate y el infaltable dulce de leche”.

Seba García, apunta para cerrar, cómo la coctelería es parte de este fenómeno también de la hiperlocalización. “Presidente Bar es parte de una nueva escena que celebra la cultura, el buen beber y la hospitalidad con un lenguaje contemporáneo. No venís solo a tomar un cocktail, te adentrás en un universo donde la coctelería dialoga con la cultura y el alma de la ciudad”, explica.

Y cierra: “Proponemos una experiencia que va mucho más allá del cocktail. Nuestra novedad no está solo en los ingredientes o en las técnicas —que por supuesto cuidamos al detalle—, sino en el modo en que reinterpretamos la hospitalidad. Apostamos a una coctelería que celebra nuestras raíces latinoamericanas con una mirada contemporánea, una estética sofisticada y un servicio que busca emocionar. Cada visita es una invitación a vivir un ritual: el del buen beber, el del encuentro, el del asombro”.