Quiere Napo imponerse sobre los democráticos: Sindicato El Siglo de Torreón

Contradictorio en su decir y en su hacer, Napoleón Gómez Urrutia desde el Senado señala que los trabajadores tendrán derecho a adherirse al sindicato que sea de su elección, pero a través de una demanda pretende que se desconozca al Sindicato Democrático para que los obreros allí agremiados regresen de forma automática al Sindicato Minero Nacional que dirige el legislador.
Ismael Leija Escalante, secretario general del Sindicato Nacional Democrático de Trabajadores Mineros, Metalúrgicos, Siderúrgicos y Conexos (SNDTMMSC) recordó que miles de mineros de Coahuila abandonaron al sindicato que Gómez Urrutia encabeza y que dirigió por 12 años desde el extranjero durante su auto exilio a Canadá.
Fue así como nació el Sindicato Democrático, que se constituyó de manera legal, dijo el dirigente nacional, mientras Gómez Urrutia huía del país por las acusaciones de robo y fraude a sus agremiados, y regresó como senador electo por Morena.
Leija indicó que el gobierno que encabezará el presidente Andrés Manuel López Obrador ha mostrado interés por la clase obrera, como lo demostró quien será la secretaria de Trabajo de su gabinete, Luis María Alcalde Luján, quien externó que es hora de que los trabajadores decidan por sí mismos quién debe representarlos sindicalmente.
Esta postura, que Napoleón supuestamente respalda desde el senado, es contraria a las acciones que realmente toma, pues pretende obligar a regresar a las 10 secciones que abandonaron su sindicato y nombraron una dirigencia nueva en un gremio diferente.
Cuestionó las palabras de libertad y derechos de los trabajadores que dice el senador plurinominal, quien desde 2002 dirige su sindicato por herencia, y no permite la celebración de elecciones para renovar su dirigencia nacional.
Antecedentes El Sindicato Nacional Democrático está avalado por las votaciones internas de las secciones que lo confirmaron, los recuentos de las secciones 147, 288 y 293, y el propio reconocimiento de la Dirección General de Registro de Asociaciones de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social, que el 10 de febrero de 2015 les entregó su registro con el número 6370, con lo que su personalidad jurídica como gremio quedó acreditada y es legal.
Inmediatamente después, ese mismo año, Napoleón Gómez Urrutia ordenó desde Vancouver que el Sindicato Minero promoviera un juicio de nulidad para que se desconociera al Sindicato Nacional Democrático.
El ocho de noviembre de 2017 el sindicato que encabeza Gómez Urrutia presentó un nuevo juicio, ahora en calidad de amparo, para solicitar la anulación de los recuentos de votos a puerta de factoría, donde los trabajadores externaron su deseo por dejar a los mineros de “Napo” y adherirse a los democráticos.
Ambos juicios se acumularon en un solo expediente, cuyo proceso judicial está por concluir.
Para Ismael Leija Escalante el fallo que dicte el juez será de no procedencia de las demandas del sindicato minero.
El Sindicato Democrático actuó conforme a derecho y apegándose a las leyes para crear el organismo, y el registro número 6370 otorgado por la Secretaría del Trabajo, así como los laudos o sentencias de la Junta de Conciliación que sancionó las votaciones, mostraron que el deseo de los trabajadores está fuera del gremio de Napoleón Gómez Urrutia.
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