El teatro colombiano estará presente en la segunda edición del FATCoahuila Milenio

Esta será la segunda edición del Festival Alternativo de Teatro Coahuila (FATCoahuila), encuentro escénico que tiene como invitado de honor a Colombia, en contexto de los 200 años del hermanamiento como naciones independientes, y es así “que decidimos celebrarlo en el escenario y plantear este diálogo alrededor del festival”, dice en entrevista Consuelo Salas, directora artística y académica del festival.
La edición se celebrará del 13 al 21 de octubre de 2023 a través de 28 presentaciones, con compañías nacionales e internacionales.
Sin embargo, confiesa la directora, “seguimos con las gestiones con la Coordinación Nacional de Teatro, del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura, solicitando el préstamo del Teatro Isauro Martínez y el Teatro Alfonso Garibay, y esperamos nos den respuesta positiva y poder contar con estos escenarios; también vamos a tener presentaciones en el Centro Cultural José R.
Mijares”.
A pesar de ello, asegura que, como en la primera edición, el teatro llegará a otros territorios y municipios, entre los que se encuentran Francisco I.
Madero y San Pedro: “Estamos también en proceso de negociación con el municipio de Matamoros, esperando que se sumen.
Trabajamos por los públicos que no tienen fácil acceso a los escenarios y por eso llevamos estos espectáculos”.
¿Cuáles son las propuestas escénicas del país invitado? “Vienen seis compañías de Colombia, de diferentes ciudades.
Vienen grupos de amplia trayectoria y circulación en Iberoamérica: son compañías que tienen muchos años de estar desplazándose en diferentes festivales internacionales, compañías con reconocimientos del Ministerio de Cultura de Colombia”.
La propuesta del FATCoahuila está programada para todos los públicos.
“Entre ellas está Simplemente José, obra emblemática del teatro colombiano; viene otra obra que se llama Maestros, representada y actuada por Alexandra Escobar, actriz del Teatro La Candelaria, uno de los grupos artísticos más importantes de Iberoamérica porque es quien ubica a Colombia en la geografía teatral mundial por su propuesta metodológica de la creación colectiva”.
Además de la programación artística, el evento contará con actividades académicas como talleres, seminarios, conversatorios y mesas de diálogo.
Cabe destacar que llegarán a Coahuila programadores teatrales.
“La idea es redescubrir esos circuitos de los diferentes grupos y estados de México, y los diferentes departamentos de Colombia; la idea es que estos programadores abran sus puertas al teatro mexicano, al teatro coahuilense y a estos grupos, que vienen de Colima, Chihuahua, Nuevo León, y de Coahuila, por supuesto, para que puedan ser vistos por estos programadores y puedan ser invitados también a circular en festivales internacionales”.
Porque, dice Consuelo Salas, “en el marco del Festival Alternativo de Teatro Coahuila, vamos a tener a personas muy reconocidas en Latinoamérica, desde la investigación y el dramaturgismo, con maestras como Rocío Galicia o Martha Herrera Lasso”.
En futuros objetivos y proyecciones, adelanta a MILENIO que el invitado de honor de la siguiente edición será Argentina.
“El tener un país invitado es una labor de gestión internacional y los países que se sumen están invirtiendo, así que beneficia a todos.
Creemos que es importante que desde Coahuila se mire Latinoamérica, y que cuando se llegue a México se suba hasta Coahuila, que lo estamos consolidando como un hogar teatral para Latinoamérica y el Caribe”.
Guatemala, a la esperaConsuelo Salas asegura que “estamos en conversaciones con la compañía Las poderosas, de Guatemala, porque desde allá nos apoyan a que vengan a México, pero no hemos podido recaudar los recursos para que lleguen a Torreón.
Ellas vendrían a trabajar con las mujeres sobrevivientes de violencia, una metodología de salvación a través del teatro, donde, en conjunto con una colectiva en Torreón que se llaman Las justicieras de paz, atenderán a estas mujeres sobrevivientes de violencia.
Este proceso de intervención, que dura dos semanas, termina con un montaje escénico”.
PCL