Asesinan a cuatro indígenas náhuatl en distintos hechos en occidente mexicano Infobae
Morelia (México), 1 may. Cuatro indígenas de la etnia náhuatl fueron asesinados a balazos, en dos hechos registrados este lunes en el occidental estado mexicano de Michoacán, donde en lo que va del año suman nueve aborígenes muertos y dos desaparecidos.
La comunidad náhuatl dio a conocer que tres de las víctimas fueron asesinadas por un grupo armado que las sorprendió cuando se encontraban en una vivienda del poblado denominado Colola, en el municipio de Aquila, en la costa del Pacífico mexicano.
La cuarta víctima es un hombre que fue asesinado a balazos en el poblado Motín del Oro, ubicado a tres kilómetros de Colola.
La Fiscalía General del Estado (FGE) informó que abrió una carpeta de investigación para determinar si ambos hechos tienen relación entre sí, así como para tratar de identificar a los asesinos.
Cabe mencionar que el 14 de abril fue asesinado Juan Medina, líder indígena de la comunidad de Santa María Ostula, también del municipio de Aquila, cuando vendía comida en una fiesta patronal en la localidad de El Salitre, en el vecino municipio de Chinicuila.
En tanto, el primero de abril fue asesinado Eustacio Alcalá, líder indígena de la comunidad de San Juan Huitzontla, Aquila, mientras que el 15 de enero fueron plagiados y desaparecidos el abogado Ricardo Lagunes y el profesor Antonio Díaz, quienes encabezaban la defensa de indígenas contra la extracción de mineral de hierro por la empresa transnacional Ternium. En este último caso, hay dos detenidos.
Además, el 12 de enero pasado, los indígenas Isaul Nemecio Zambrano, Miguel Estrada Reyes y Rolando Mauno Zambrano, fueron asesinados cuando se encontraban en un puesto de seguridad comunal en Santa María Ostula.
De acuerdo con información de las áreas de inteligencia del Gobierno de Michoacán, en Aquila operan al menos tres grupos de civiles armados, quienes se ostentan como "autodefensas”.
Aquila es uno de los tres municipios que conforman los 274 kilómetros de litoral que tiene la costa de Michoacán, donde la Secretaría de Marina Armada de México (SEMAR), ha detectado una red de tráfico de cocaína, procedente de Sudamérica. EFE
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