Sigue el desgarriate de los medicamentos Índice Político
La Espinita
Andy S. K. Brown*
- Sigue el desgarriate de los medicamentos
- La Crónica de la nueva credencial del INE
- ¿Miles Pike, el paracaidista de Balderas?
Desgarriate, sí. Describe mejor lo que ya es un verdadero desmadre por el desabasto de medicamentos en las instituciones públicas de salud, lo que ha provocado el agravamiento y hasta la muerte de millares de pacientes.
A los “genios” encargados de reabastecer las farmacias se les ocurre, ya en el último mes del ejercicio fiscal 2025 –cuando ya no hay dinero–, emitir una convocatoria para el surtimiento del ISSSTE, porque Martí Batres –quien está en todo, menos en misa– hizo mal los cálculos y sus dispensarios ya están, otra vez, prácticamente vacíos.
Ello también le pasó por alto a Eduardo Clark, el subsecretario de los Power Points, ahora entretenido en la carpintería de la SSA, acelerando que claven y pinten los puestos de garnachas a los que eufemísticamente bautizaron desde como “farmacias del Bienestar”. Por favor, no se ría.
El otro genio, el consentido de la señora Claudia Sheinbaum, su ex secretario particular Carlos Ulloa, ahora en Birmex, ¡en la grilla! A la espera del momento en el que por fin se decidan a poner de patitas en la calle al pillo Zoé Robledo para, a partir de entonces, ser él quien encabece a lo que alguna vez fue el IMSS y que hoy, verdaderamente, ya saqueado, da pena ajena.
De nada sirvió la costosísima Megafarmacia del patriarca cuatrotero que apenas si surtía media docena de recetas al día.
De nada han valido, tampoco, las denuncias de que gran culpa del desabasto se la deben los enfermos, algunos ya moribundos, al Cártel Tabasco Nueva Generación, cuyo capo es “Andy” López, pues han sido las empresas indias, chinas y otras asiáticas contratadas por él y por sus $icarios las que han incumplido con las entregas de los cientos de miles de cajas de las medicinas comprometidas. Peor, todavía, son laboratorios que ni siquiera tienen registro de nuestra FDA: la Cofepris.
Y para colmo, desde el tapanquito de Palacio Nacional, se sigue denostando a los fabricantes mexicanos a quienes sí se exige que cumplan, pero no les pagan enormes adeudos que mantiene, entre otras, esa entelequia que es el IMSS Bienestar.
Igualito que en Pemex: Tú me surtes y a ver cuando te pago… si es que te pago.
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La 4T sigue comprando lealtades periodísticas.
Una de las más recientes fue la adjudicación de un contrato millonario del INE a la empresa de uno de los editores que, invariablemente, ha mantenido una posición acrítica –escasamente periodística– con los gobiernos federal y los estatales, sin importar el color de la franquicia que los haya llevado a poder.
Ayer, el Instituto que sin contrapesos internos preside la sonorense Guadalupe Taddei dio a conocer haber adjudicado “el contrato abierto, para la partida única, ejercicios fiscales 2026, 2027, 2028, 2029, 2030 y 2031, al licitante Cosmocolor, S.A. de C.V. en participación conjunta con Icards Solutions, S.A. de C.V. y Talleres Gráficos de México, conforme a la cantidad mínima y máxima de los servicios que podrán solicitarse”… y que no son otros que la elaboración de la credencial para votar.
Cosmocolor ha tenido malas experiencias y peores productos. En el gobierno capitalino del finado Manuel Camacho Solís fue la encargada de la producción de las licencias de manejo de las que, a los pocos meses, se borraban las imágenes y lo ahí impreso.
¡Contratazo!, pues. Aquiescencia, a cambio.
Esta es La Crónica de ¿una pifia anunciada?
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Automovilistas y viandantes por la capitalina Avenida Juárez y la esquina de Balderas se sorprendieron la mañana de ayer al ver colgado de un poste a un paracaidista que, después se supo, es estadounidense y responde al nombre de Miles Pike.
Se lanzó desde una avioneta con matrícula privada que sobrevoló CDMX, muy cerca del espacio aéreo restringido sobre el Zócalo, Catedral y Palacio Nacional, aunque no faltó quien especulara que quizá se tratara de un marine que llegaba de avanzada, enviado por el anaranjado Trump, para poner orden hasta en las cañerías del drenaje.
Miles Pike es muy conocido en el suroeste del vecino del norte. Es un cantante de góspel y música evangelista que, por cierto, es tuerto.
Su homónimo que cayó en Balderas, por lo pronto, o no supo calcular su aterrizaje, o de plano ¡está ciego!
@AndySKBrown1
* Pseudónimo bajo el que se redactan informaciones aportadas por los colaboradores y lectores del portal Índice Político.
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