¿Así tratarían hoy al Niño Jesús? Iglesia de Chicago monta un pesebre con el Niño Jesús esposado y cubierto con papel aluminio en alusión a redadas de Trump y al trato a familias detenidas en EEUU El Imparcial
Una iglesia bautista en Evanston, al norte de Chicago, generó polémica nacional tras montar un pesebre navideño que recrea una escena inspirada en las políticas migratorias reforzadas por la Administración Trump.
La instalación muestra al Niño Jesús esposado y envuelto en papel aluminio como en los centros de detención y a María y José usando máscaras para protegerse de gases lacrimógenos. La información fue difundida por la agencia EFE este 9 de diciembre de 2025 y ha avivado un debate sobre el trato a las familias migrantes en Estados Unidos y el uso de símbolos religiosos para denunciar estas prácticas.
Desde la iglesia Lake Street Baptist, sus responsables explicaron que el objetivo es invitar a reflexionar sobre lo que consideran paralelos entre la historia bíblica de la Sagrada Familia como refugiada y las experiencias actuales de personas migrantes perseguidas o separadas en centros de detención.
¿Cómo es el pesebre que causó controversia?
A diferencia de las representaciones tradicionales que evocan paz y adoración, la escena creada en Evanston muestra una versión marcada por elementos contemporáneos:
- Niño Jesús maniatado, cubierto con una manta térmica similar a las usadas en centros de detención migratoria.
- María y José con máscaras antigás, en referencia al uso de agentes químicos en operativos federales.
- Centuriones con gafas oscuras y chalecos con la leyenda “ICE”, aludiendo al Servicio de Inmigración y Control de Aduanas.
Según explicó a EFE la ministra asociada Jillian Westerfield:
Comenzamos a hablar sobre cómo íbamos a representar lo que estaba ocurriendo, conectado con la historia sagrada. Vimos paralelos”.
Para la congregación, la intención no es provocar por provocar, sino vincular la narrativa bíblica con realidades que consideran urgentes.
¿Por qué la iglesia decidió usar esta representación?
Los encargados del montaje tomaron como punto de partida la historia bíblica en la que Herodes ordena matar a los niños de Belén, obligando a María, José y Jesús a huir a Egipto. Para Westerfield, el paralelismo con familias que migran hoy debido a la violencia es evidente.
La ministra explicó que imaginaron el pesebre como una escena de separación familiar forzada, similar a las registradas durante operativos migratorios recientes. Señaló que el Niño Jesús con manos atadas se inspira en imágenes vistas durante la operación migratoria Midwest Blitz en Chicago.
Las máscaras protectoras aluden a armas usadas por el gobierno federal contra habitantes de Chicago y Evanston, no solo contra quienes protestaban, sino también periodistas, miembros de la comunidad y hasta niños”, añadió.
Recordó incluso que menores que se preparaban para un desfile de Halloween fueron expuestos a gases lacrimógenos:
Nadie debe ser tratado de esa forma”.
¿Cuál ha sido la reacción pública?
La instalación despertó reacciones encontradas. Algunos espectadores la consideraron una forma legítima de denuncia; sin embargo, también hubo críticas severas:
- Personas señalaron que se trata de una “herejía” o una “blasfemia”.
- Alguien retiró la máscara de María y las bridas del Niño Jesús, obligando a la iglesia a reponer los elementos.
Pese a ello, Westerfield insiste en que lo mostrado no busca desacreditar creencias religiosas, sino denunciar prácticas que afectan a comunidades vulnerables.
La gente debería estar molesta porque esto le está sucediendo a muchos, no a un muñeco”, declaró.
¿La iglesia afirma que el mensaje es político o moral?
Los responsables de la instalación aseguran que no promueven una postura partidista. Westerfield afirmó:
Este no es un problema de un partido político o gobierno determinado. Es un problema de larga data”.
Sostienen que el maltrato a personas migrantes se ha documentado por décadas y que ninguna administración ha corregido estas prácticas de forma efectiva. La intención, aseguran, es llamar a la reflexión ética, no apoyar o atacar a un partido.
El reverendo Michael Woolf, líder de la iglesia, espera que quienes se sienten incómodos con el pesebre piensen también en las familias que huyen de la violencia y enfrentan separación, detención o deshumanización.
Esperamos que esa conversación impulse a las personas a actuar, independientemente de su fe”, dijo.
La iglesia ya había hecho pesebres con mensajes críticos
De acuerdo con EFE, la iglesia tiene antecedentes de usar la temporada navideña para abordar temas sociales. En 2023, el pesebre tuvo un mensaje contra la guerra en Gaza y mostraba al Niño Jesús rodeado de escombros, en alusión a los civiles atrapados en el conflicto.
El tema surge mientras la Administración Trump ha reforzado desde enero medidas como:
- Aumento de detenciones y deportaciones.
- Participación de la Guardia Nacional en ciudades como Chicago.
- Mayor autoridad al ICE en operativos locales.
- Restricciones al asilo y programas humanitarios.
Este panorama ha mantenido tensiones en comunidades con población migrante y ha motivado diferentes expresiones de rechazo, como el pesebre de Evanston.
