Delincuentes amenazan a mujer mototaxista frente a su hija y le exigen que llame a gerente de empresa para que pague S/30 mil Infobae
Una mujer mototaxista de Carabayllo vive bajo amenaza constante tras ser víctimas de extorsión por parte de la banda criminal “Los Zetas del Cono Norte” que exige pagos de cupos a pequeñas asociaciones de transporte en la zona norte de Lima y siembra el terror entre los conductores de estos vehículos menores y temen perder la vida mientras trabajan.
El hecho más reciente quedó registrado por cámaras de vigilancia en un asentamiento humano de Carabayllo. En las imágenes se observa a una mototaxista que iba junto a su hija pequeña, cuando es interceptada por dos hombres a bordo de una moto. Uno de los delincuentes, armado, obligó a la mujer a llamar en ese instante al gerente de la empresa de transporte para exigirle el pago de cupos. El agresor incluso grabó un video de la amenaza, advirtiendo que, de no recibir una respuesta favorable, tomarían represalias.
“Me cerraron con un carro negro y desaparecieron las dos motos lineales. Me enseñaron su pistola y eso fue lo que más miedo me dio porque estaba con mi bebé. Me dijo: ‘Llámalo, llámalo’”. Sintiéndose acorralada, la mujer contactó de inmediato al dueño del vehículo, quien también recibió llamadas extorsivas similares.
Detonaron explosivo y amenazas desde febrero
De acuerdo con el testimonio del gerente, las exigencias de la banda se remontan a febrero de este año. Los extorsionadores reclaman el pago de cincuenta mil soles y, además, una cuota diaria de cinco soles por cada unidad operativa. “Se han presentado reiteradas amenazas”, afirmó, “pero en las últimas semanas la presión ha aumentado, y ahora solicitan treinta mil soles y cuatro soles por moto, bajo amenaza directa contra mi familia”.
La escalada de violencia llegó a un punto crítico cuando los delincuentes detonaron un explosivo en la vivienda del gerente, donde también reside su esposa, regidora del municipio de Carabayllo. El ataque, ocurrido alrededor de las tres de la madrugada, dejó vidrios rotos, daños en el portón y la caja de gas de la casa. Las cámaras de seguridad capturaron la fuga de los responsables tras la agresión, aumentando la alarma en el vecindario.
Las amenazas continuaron a través de mensajes de WhatsApp, donde los delincuentes, identificados como parte de “Los Zetas del Cono Norte”, presumían de su poder y conocimiento sobre las actividades y movimientos de la familia. “Sabemos todo de ti y en qué te movilizas. Todo atentado y muerto que hago, lo grabo. No esperes estar en uno de mis videos”, advirtieron en uno de los mensajes. Este tipo de comunicaciones, según detallan las víctimas, se han vuelto cada vez más frecuentes e intimidantes.
Las autoridades policiales han iniciado una investigación para dar con los responsables. Aunque parte de la banda ha sido detenida en operativos previos, los cabecillas y otros miembros continúan operando y extorsionando a vecinos y empresarios del Cono Norte. El temor y la vulnerabilidad en la zona han ido en aumento, especialmente entre quienes, por necesidad económica, dependen de actividades informales y vinculadas al transporte.
Denuncias por extorsión se incrementaron en más del 50%
Entre enero y julio de 2025, las denuncias por extorsión en Lima Metropolitana crecieron un 54,5 % respecto al mismo periodo de 2024, de acuerdo a datos del Sistema de Información Policial (SIDPOL). Solo en junio, el registro llegó a un récord de 69 denuncias diarias, lo que evidencia la expansión del delito y su normalización en el entorno urbano.
En total, el Cercado de Lima lidera las cifras con 950 denuncias hasta julio, seguido de San Juan de Lurigancho (930) y Ate (498). El incremento más fuerte se observa en Puente Piedra, que pasó de 139 a 397 casos (+185,6 %), y en Magdalena del Mar, que casi duplicó su número de denuncias. Otros distritos como Miraflores, Pueblo Libre, San Martín de Porres y Los Olivos también reportaron subidas notorias.
Frente al avance de la extorsión, el Gobierno implementó la línea gratuita Central 111 PNP, disponible las 24 horas, junto a los números 1818 y 942841978 para denuncias confidenciales. Sin embargo, la percepción ciudadana dominante es que estas acciones resultan insuficientes ante la magnitud del problema.
