Pese a la “rabieta” de Juan Fernando Quintero, River avanzó a cuartos de la Copa Libertadores: Miguel Ángel Borja marcó penal Infobae
River Plate tuvo una noche complicada en los octavos de final de la Copa Libertadores, en la que recibió en la vuelta a Libertad de Paraguay en el estadio Monumental, donde no pudo pasar del empate por 1-1 en el marcador global y fue necesario definir todo en la serie de penales.
Sin Juan Fernando Quintero en los cobros, River avanzó a cuartos con triunfo 3-1, en el que Miguel Ángel Borja anotó uno de los cuatro disparos de la Banda Cruzada, en la que Franco Armani, exportero de Atlético Nacional, fue el heroe al atajar el último disparo para asegurar la clasificación.
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Uno de los hechos que llamó la atención fue la “escena” del volante colombiano al ser sustituido en el segundo tiempo, ya que fue el sacrificado al momento de la expulsión de Giuliano Galoppo y no solo sorprendió a los aficionados, sino que le causó mucha rabia al cafetero.
La rabieta de “Juanfer”
El estadio Monumental vivió un momento tenso durante el partido de vuelta de octavos de final de la Copa Libertadores, cuando River Plate enfrentó a Libertad. Juan Fernando Quintero, titular en el equipo dirigido por Marcelo Gallardo, salió del campo en el segundo tiempo y evidenció su malestar tras la sustitución.
El encuentro avanzaba con “Juanfer” como uno de los futbolistas más participativos de la ‘banda cruzada’. Durante la primera etapa, tuvo remates desde fuera del área y ejecutó varias pelotas quietas con precisión. Sin embargo, la expulsión de Giuliano Galoppo en el minuto 52 obligó al técnico Gallardo a modificar su planteo. Dos minutos después, el colombiano abandonó el terreno, convirtiéndose en el jugador elegido por el entrenador para ajustar el medio campo.
Al dirigirse al banco de suplentes, Quintero mostró señales claras de inconformidad. Las cámaras del estadio captaron el disgusto del colombiano, quien manifestó su enojo y pronunció insultos mientras se sentaba junto al resto de los relevos. Su reacción generó comentarios en redes sociales y sorprendió tanto a los hinchas presentes como a quienes seguían el partido por televisión.
La decisión de reemplazar al volante, uno de los futbolistas más activos hasta ese momento, generó repercusión dentro y fuera del estadio. El jugador no ocultó su desacuerdo, mientras Gallardo justificó la variante en busca de mayor solidez y velocidad tras quedar con un hombre menos.
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