Tensiones diplomáticas entre Rusia y Azerbaiyán Excelsior

A principios de semana, me llegaron noticias sobre redadas a miembros de una diáspora azerí en Ekaterimburgo, Rusia.
Creí que todo era una nota sin mucho interés; esto porque no había sucedido en Moscú y parecía una redada rutinaria ante la intensificación de la seguridad en territorio ruso.
A las pocas horas, esa noticia se propagó en medios internacionales.
Decidí echar un vistazo, pues no era normal el impacto: los servicios de seguridad de Rusia detuvieron a más de 50 personas de nacionalidad azerí que pertenecen a la diáspora más importante de Azerbaiyán en Ekaterimburgo.
Dos de las 50 personas fallecieron en circunstancias extrañas después de ser arrestadas y sometidas.
Los videos de las redadas y de los arrestos se hicieron virales, mostrando la brutalidad que usan los OMON y el FSB al someter a dicho grupo de personas.
El evento se volvió caótico dentro y fuera de Rusia; esencialmente en Azerbaiyán.
Los hermanos Safarov, azeríes por nacimiento y con ciudadanía rusa, fueron los que perecieron durante las redadas.
Uno, falleció supuestamente por un ataque al corazón; y el otro, realmente nunca se supo por las autoridades locales.
Ambos cuerpos fueron repatriados a Bakú, donde las autopsias registraron golpes, heridas y traumas en distintas partes de sus cuerpos.
El hecho causó indignación en Azerbaiyán y en todo el gobierno de Ilham Alíev.
Las respuestas y las declaraciones no se hicieron esperar.
El gobierno azerí pidió una explicación sobre lo sucedido, pues todo parecía que tenía un toque xenófobo y racial, especialmente por la brutalidad y el clásico trato a los migrantes de las exrepúblicas soviéticas.
A la par de eso, Bakú dio diversos manotazos que dolieron en Moscú: 1.
Se cancelaron todos los eventos culturales rusos, como también la visita de parlamentarios rusos y de un oficial de alto nivel.
Lo mismo sucedió con una visita programada a Moscú por parte de funcionarios azeríes.
2.
Los Servicios de Seguridad de Azerbaiyán realizaron una redada en el edificio del medio estatal ruso ‘Sputnik Azerbaijan’, el cual no contaba con una licencia oficial desde febrero de 2025.
Durante la redada se detuvieron a siete trabajadores del medio ruso y a dos supuestos agentes del FSB.
3.
Captura de algunos grupos criminales donde había ciudadanos rusos de por medio.
Ante la respuesta azerí, Rusia explicó que lo sucedido en Ekaterimburgo tenía que ver con un caso judicial y una investigación criminal que data de los años 2001, 2011 y 2021.
Algunos miembros de la diáspora azerí en la ciudad pertenecen a distintos grupos criminales que presuntamente hacían contrabando de narcóticos y alcohol, extorsionaban y habrían realizado homicidios en la primera década de los años 2000.
Al pasar los días, una buena parte de los detenidos fueron puestos en libertad.
Las tensiones entre ambos países con pasado soviético se volvieron un asunto diplomático que no ha escalado a algo más, pero que sí deja heridas en las relaciones bilaterales.
Lo más reciente que añade un agravante a estos hechos, data del 25 de diciembre de 2024 cuando un avión de pasajeros de Azerbaijan Airlines fuera derribado por baterías de defensa rusas al pasar cerca de Grozny, Rusia.
Asimismo, el hecho de que el mandatario azerí no haya acudido al desfile militar del 9 de mayo de este año en Moscú.
Moscú y Bakú cooperan al más alto nivel con lo sucedido en Ekaterimburgo, pero realmente al leer la trama y las declaraciones, se nota la minimización que proyecta el gobierno ruso.
Columnista: Ricardo Ortiz EsquivelImágen Portada: Imágen Principal: Send to NewsML Feed: 0