
Partir
Amanezco antes que el sol. Camino descalza por la casa y me siento frente a la ventana. El verano se está yendo. Ahora, todo parece quieto. Como pasos, algo late. Miro la palabra “parto” por todos lados, como si fuera un cubo.
De un lado, veo a mi papá, en kimono, empacando trajes. Las valijas son de cuero y tienen correas como cinturones. Las paredes son de papel de arroz y las puertas, corredizas. Puedo ver la escena completa. Es suave. Doy vuelta el cubo y pienso que él partió no cuando salió de Japón sino cuando decidió quedarse en Argentina. De esa escena me falta una pieza. Hay algo en esa decisión que no entiendo.
Miro el otro lado de la palabra. “Parto” también es el acto de llegar a la vida.
Una sabe cuándo es el momento. No por los cálculos del médico, sino porque una lo reconoce, como se reconoce a alguien a quien se espera apenas se dibuja su silueta. O antes.
Una acepta lo que siente. El médico “da” una fecha, como una sentencia.
Decido no ir a trabajar. Me quedo todo el día en casa. No como y camino de un lado al otro, como los leones en las jaulas. Soy el león y soy la jaula que lo encierra. Pienso en mi infancia.
Me di cuenta de que éramos diferentes cuando fui al colegio.
Los otros chicos se estiraban los ojos con los índices y me decían “china”. Yo les decía que era japonesa y ellos decían que era lo mismo. Yo no les respondía. No entendía por qué decían eso, ni muchas otras cosas. Me gritaron, me empujaron y algunos me golpearon. Todos ellos parecían muy enojados conmigo.
Cuando creí que todo había pasado, como pasan los terremotos, dos chicos más grandes que yo, en el baño de varones del colegio, hicieron llorar a mi hermano. Nunca supe por qué.
Desde ese día empecé a hablar en primera persona del plural.
Los terremotos no son solo el temblor de la tierra y una de las primeras palabras que aprendió a decir mi papá. Para los japoneses, son una posibilidad.

Ellos, los otros chicos, estaban enojados con nosotros. Yo no decía nada sobre otros gestos que veía. Como por ejemplo que no agradecían. Como si las cosas hubiesen estado siempre donde las encontraban, y nadie las hubiese puesto ahí para ellos. La comida, la ropa, los juguetes. También dejaban los zapatos tirados. No los acomodaban paralelos como los pies, y de modo que no quedaran en el paso o desalineados. A veces quedaban con la suela hacia arriba y los cordones atados, y ellos demoraban cuando querían volver a ponérselos.
Después conocí a sus familias y sus casas. También eran diferentes. O éramos nosotros los diferentes. Yo no sabía.
La comida que más me gustaba era las huevas de salmón. Mi papá las traía a veces, de los barcos. Los otros chicos no las conocían. Tampoco sabían dónde estaba Japón, y que había habido una guerra fuera de las películas.
Siendo adolescente me enojé con el cine porque embellece la guerra. La guerra no es así, pensé. Cuando le pregunté a mi papá, él me habló del miedo, me describió las noches de apagón y el intento de esconderse en la oscuridad. De repente algo que rasga el silencio y crece. Después, un desfile de pájaros blancos enormes. El ruido es una vibración en el cuerpo. El silencio está hecho pedazos en el suelo. Él despliega los brazos. Tiene los ojos muy abiertos y mira al cielo que afuera es celeste y él y yo vemos negro, sentados en el comedor de casa. Los aviones que venían a bombardearlos. Me dijo que eran bellos. Espantosamente bellos.
Dejo de mirar los cubos de las palabras e imágenes. Mi cuerpo me llama.
Reconozco una de las señales que me enseñaron en el curso. Es el momento.

Son más de las once de la noche. Hago las llamadas de aviso. Mis padres me dicen que vienen a buscarme. Estoy tranquila y espero. Estoy sentada en el living de mi casa. Todavía suena la música que había puesto. Bach. Hay cosas que son universales. La mayoría recorremos más o menos los mismos caminos. Con algunas diferencias. No tengo televisión. Cuando era chica tampoco teníamos. Por elección. Es difícil explicar por qué uno elige algunas cosas cuando lo hace desde un lugar donde no hay palabras. Mi papá cuando era niño se dormía mirando las vetas de la madera en las vigas de la casa. La televisión no es necesaria. El cubo muestra otro de sus lados. Sigo esperando. Las piernas cruzadas en posición de loto, una mano por encima y otra por debajo de la panza. El futuro irrumpe en mí y es casi un reflejo mirar hacia el pasado. Insiste mi infancia: los otros chicos no corregían nunca a sus papás como yo, que a veces le decía al mío que se decía “vaso” y no “taso”, que yo me imaginaba que era el masculino de taza.
Adopté ese lugar que es la diferencia como mío. Algún lugar tenía que adoptar: el país en el que vivía me consideraba extranjera y al otro ni se me ocurría ir. Veinte años después fui. Y también fui extranjera. Me dolió como duele un golpe dado en una herida. Sufrir, amar, partir, dice el tango. A mi papá no le interesa el tango, ni el fútbol. Se quedó por otras cosas. No veo un lado del cubo, como si estuviera incompleto.
Al conocer Japón conocí más a mi padre. No tanto por lo que tenían en común sino por lo que los diferenciaba. La rebeldía, prolija y tenaz, por ejemplo.
Levanto el cubo y miro otro lado. Partir es hacer mitades, dice el diccionario.
Mitad: half. Así se llama en Japón a los hijos de un japonés con una persona de otra raza.
Antes se usaba la palabra “ainoko”, que significa algo así como hijo del amor, pero después de la guerra esa palabra empezó a tener una carga despectiva porque se usaba para los hijos de las japonesas con soldados estadounidenses. Hijos del enemigo.
Así que yo soy half. Soy japonesa en Argentina y argentina en Japón, así, con las minúsculas para mí y las mayúsculas para el país.

Partir también es romper, agrega el diccionario. Romper, separar partes. Al otro lado del cubo. Mi papá dejó en Japón a su madre, viuda desde que él tenía dos años y a su hermano, enfermo desde la guerra.
Mi abuela se llamaba Katsu y dicen que yo me parezco a ella.
No la conocí salvo por historias que contaba mi papá y una foto que vi una vez en la que busqué a la mujer fuerte que mantuvo sola a su familia y a la de su marido, perdiéndolo todo varias veces durante la guerra.
En la foto había una viejita que parecía una ciruela de esas que en Japón se llaman umeboshi. Chiquita y arrugada, incómoda ante la cámara.
Sobre todo ahora dicen que me parezco a ella. Ahora que voy a tener a mi hijo sola. Sola a los cuarenta. Dijeron que soy “añosa” y a mí me sonó un árbol. Los árboles no paren. Algunas conjugaciones del verbo “parir” parecen más relacionadas con detenerse o estar de pie que con dar a luz. Los árboles no dan a luz. Dan sombra.
En lo que sí me siento parecida a un árbol, más ahora que a los veinte años, es en la solidez. Cierta forma de fortaleza. Una de las formas de decir fuerte en japonés es Kenta. Qué palabra tan bella...
Llega el dolor del que me habían hablado. Interrumpe y devora todo. No grito como en las películas. La casa está en silencio.
Llegan mis padres, juntos, como en los últimos cuarenta y dos años.
Se casaron a los pocos meses de conocerse. Mi papá tuvo un solo invitado a su casamiento: un empleado de la empresa para la que había venido a trabajar. Mi mamá en cambio tuvo cientos, porque estaba en su ciudad y esa ciudad era chica.
Casarse con un japonés era lo más raro que alguien podía hacer en Necochea. Una vez leí que la forma más extrema de la exogamia es casarse con alguien de otra raza.
Después vinieron a vivir a Buenos Aires. La oficina en la que trabajaba mi padre estaba en La Boca, cerca del puerto, en el que entraban los barcos pesqueros que atendía.
Él tenía dos jefes. Para un japonés un jefe no es lo mismo que para un argentino. Las jerarquías se graban de un modo profundo. No es un orden caprichoso, es algo férreo. Los jefes le dijeron un día que llevara a su mujer para cenar juntos. Mi papá le dijo a ella el día y la hora. Iban a esperarla en la puerta de la agencia. Ella tomó dos subtes y llegó seis minutos tarde. Cinco minutos después del horario acordado, los jefes dijeron que iban a ir caminando hacia el lugar, que ella fuera cuando llegara. Mi papá se quedó a esperarla. Ella llegó unos segundos después. Los jefes caminaron unos metros por delante sin darse vuelta. Mis padres, detrás. Los jefes estaban ofendidos por la demora, mi madre por sus modales.

Mi papá estaba entre ambos, partido. O multiplicado. Ella siempre lo acompañó. Cómo acompañan las paredes de una casa al techo. Siempre estuvo de un modo casi invisible, como en esto que escribo. Y a veces me parecía más japonesa que él.
Ella toma el tiempo entre un dolor y el otro. Mi papá maneja.
Recostada en el auto veo pasar plátanos, tipas, arces. El dolor los borra. En su lugar deja un desierto sin árboles. Partir es dividir. Dividir es saber cuántas veces cabe un número en otro.
Cuánto cabe en uno. Uno, punto de partida. Allí cabe todo.
Mi padre eligió quedarse en esta tierra por mi mamá, y otros motivos. Los busco.
Una vez me dijo que se había quedado por el puente que está frente a la Facultad de Derecho en la avenida Figueroa Alcorta, y porque en un bosque del sur (creo que en Bariloche) los árboles que se caen no son retirados sino que se dejan para que formen parte del paisaje.
Los árboles caídos también son el bosque.
La idea de la muerte siempre fue diferente en mi casa. No era lo opuesto a la vida, sino una parte de ella. Puedo hacer una lista de las palabras que en mi casa tenían un significado diferente al que tenían afuera: muerte, yo, invierno, otro, sal, esfuerzo, palabra, beso, honor, abuelo, espera, té, trabajo, comer, silencio, aceptar, dolor.

La partera dice que no debo tener contracciones porque sino estaría quejándome. Mi madre le dice que yo no me quejo, y me da la mano.
Mucha gente se queja del tiempo. Jamás escuché en casa de mis padres quejas sobre el sol o la lluvia, el viento, el rocío, la escarcha.
La partera hace el control y antes de terminarlo llama al anestesista y al obstetra de urgencia.
Suelto la mano de mi madre.
Una hora después mi bebé está en mis brazos. Solo puedo decir las mismas frases ya dichas por todas las mujeres al ver a su hijo.
El médico llena una planilla sin mirarme. “¿El nombre?”, pregunta, ahora mirándome.
Veo mi sangre en los guantes que aún tiene puestos.
Busco adentro.
“Kenta”, respondo.
Vuelvo a decir el nombre para dárselo a mi hijo. Suave y firme, repito: Kenta.
Siento que soy una parte de algo mucho más grande. Algo que empezó del otro lado del mundo, donde la gente acomoda los zapatos cuando se los saca, y sigue acá, donde la gente los deja como quiere.
[Fotos: Gentileza Eterna Cadencia; ZUMA Press Wire/POOL/dpa; AP Foto/Eugene Hoshiko]
La presidenta Claudia Sheinbaum y el director general del IMSS, Zoé Robledo adelantaron el lunes en La Mañanera los datos del empleo formal al cierre de octubre, con un total de 22,639,050 trabajadores afiliados al IMSS sin contar a los trabajadores de las plataformas digitales. Sheinbaum presumió en su cuenta de X que es la […]
24 Horas
La industria considera que hay trámites excesivos, mecanismos administrativos presenciales y falta de opciones electrónicas para pagos, lo cual desalienta la formalización y genera inequidad en el sector
El Financiero
La Espinita Andy S. K. Brown* Impreciso Plan para Michoacán Represión enciende los ánimos Ya les urge un nuevo distractor Tras casi tres años de precampaña y campaña por todas las entidades del país, más uno de aparente ejercicio de las funciones que le asignó su antecesor, la señora Claudia Sheinbaum ¡ya va a […]La entrada
Índice Político
La respuesta a cuál es la mejor tarjeta de crédito en línea depende completamente de tu perfil financiero, tus hábitos de consumo y tus objetivos. Algunas personas priorizan el cashback, otras buscan meses sin intereses, y hay quienes necesitan una opción sin comprobar ingresos.
Lado.mx
La digitalización de pagos ha transformado el panorama comercial. Con más de 5 millones de terminales activas en el país y un mercado que alcanzará los 2.73 mil millones de dólares para 2030, convertirse en distribuidor de terminales POS representa una oportunidad sólida para emprendedores. Este modelo permite generar ingresos recurrentes mie
Lado.mx
23 de octubre de 2025 Su nombre rara vez aparece en la prensa, pero con frecuencia figura en las agendas de quienes no tienen problemas con el dinero, sino con ellos mismos. Karina Matsueva es la persona a la que uno no acude por inspiración, sino por sanación.
Lado.mx
Después de sostener una reunión con diputados federales en el Palacio Legislativo de San Lázaro, los productores de maíz anunciaron el cierre del diálogo con el gobierno federal, argumentando la falta de respuestas concretas a sus demandas. Representantes del Movimiento Agrícola Campesino manifestaron su frustración y advirtieron que, ante l
Canal 44
Autoriza cambios temporales en los mapas congresionales en respuesta a la redistribución partidista de distritos en Texas
La Opinión de Los Ángeles
San Juan Juquila Mixes, Oax. 4 de noviembre de 2025. Luego de casi nueve años de ser víctimas de desplazamiento forzado interno, las 63 familias que este martes retornaron a la agencia Guadalupe Victoria, celebraron este hecho histórico como un nuevo amanecer, y agradecieron al […]The post Familias en retorno de Guadalupe Victoria reconoce
Zona Roja
El recordado ‘Bombardero’ tiene una nueva pareja y se volvió a convertir en padre. Aunque su vida privada la ha cuidado mucho, esta vez quedó expuesta
Infobae
La representante de México se defendió y varias delegadas la respaldaron
Infobae
La titular de la Secretaría de Educación del Estado de Querétaro (SEDEQ), Martha Soto, dio a conocer que actualmente todos los planteles educativos de la zona serrana han retomado actividades escolares, teniendo solamente siete instituciones de educación básica que toman clases de manera virtual: cinco en el municipio de San Joaquín y dos en
Expreso Querétaro
Jaime GUERRERO | El Piñero Un hombre identificado como Uriel Rivera Martínez fue detenido anoche en las inmediaciones del Palacio de Minería, en el Centro Histórico de la Ciudad de México, tras cometer un delito de abuso sexual flagrante contra la presidenta Claudia Sheinbaum, según informaron las autoridades capitalinas. El incidente oc
El Piñero
Uriel "N" fue aprehendido en la zona centro de la Ciudad de México después del evento donde tocó a la mandataria sin su consentimiento
El Informador
Liberal del Sur - Periodismo TrascendenteLa presidenta Claudia Sheinbaum Pardo busca dejar su sello en la historia contemporánea de México, consolidar un proyecto de nación. COATZACOALCOS JOJU GAMBOA DURÁN Con justa razón la popularidad y aceptación de Claudia Sheinbaum Pardo ha alcanzado el 75 por ciento en las últimas mediciones publicadas
Liberal del Sur
Forbes México. Google dedica su doodle a la mariposa monarca tras migración de 7,700 kilómetros a MéxicoEl doodle de Google muestra a varios ejemplares de esta característica especie en los bosque mexicanos donde hibernarán aproximadamente hasta marzo de 2026.Google dedica su doodle a la mariposa monarca tras migración de 7,700 kilómetros a
Forbes
La iniciativa de Google invita a los usuarios a reflexionar sobre la biodiversidad, la conservación y la conexión con la naturaleza.
El Imparcial
Google celebra a la mariposa monarca, ese símbolo de resistencia, transformación y belleza natural, con un Doodle especial que conmemora su llegada a México tras una impresionante migración de más de 7,700 kilómetros desde Canadá y Estados Unidos. Este homenaje, visible hoy en la página principal del buscador, destaca el asombroso viaje que
Vanguardia.com.mx
Fernando IslasLas plataformas de streaming están apostando en serio por los eventos deportivos, con la adquisición de derechos de transmisiones clave que buscan capturar a la afición mexicana.Una de las novedades es que las siguientes Finales de la NBA, cuya temporada inicia el día 21 del mes que entra, no se podrán ver ni en televisión abier
Excelsior
Jesús VelascoLa NBA y México tienen una relación histórica, no solo por la cercanía geográfica entre ambas naciones, sino también por la gran cantidad de aficionados al basquetbol gracias a momentos históricos que hicieron voltear a los fanáticos hacia la liga, como la era Michael Jordan, la llegada de Horacio Llamas o Eduardo Nájera, y l
Excelsior
Antonio Velázquez La NBA comenzó un camino en México en el que ha dejado gratos momentos marcados por jugadores que alcanzaron sitio entre las leyendas desde el primero de los juegos oficiales de la liga el 27 de octubre de 1992, cuando con la franquicia de los Rockets figuraba Hakeem Olajuwon, uno de los centros más destacados de todos los tie
Excelsior
Últimas noticias
Clima en Tlaquepaque hoy: el pronóstico para el miércoles 5 de noviembre de 2025
Clima en Tlajomulco de Zúñiga hoy: el pronóstico para el miércoles 5 de noviembre de 2025
Clima en Tepatitlán de Morelos hoy: el pronóstico para el miércoles 5 de noviembre de 2025
Clima en Puerto Vallarta hoy: el pronóstico para el miércoles 5 de noviembre de 2025
Clima en Monterrey hoy: el pronóstico para el miércoles 5 de noviembre de 2025
Clima en Mazamitla hoy: el pronóstico para el miércoles 5 de noviembre de 2025
desafíos del cliente
Veracruz, de los más afectados con incremento de 25 % a aranceles: Coparmex-Xalapa
Invita Gobierno Municipal a familias y deportistas a disfrutar del Polideportivo Luis H. Álvarez
Llama alcalde a gobierno del estado a dialogar con grupos opositores al teleférico
Los aranceles a México y Canadá por aluminio y acero serán del 50 %, dice la Casa Blanca
¿Casa Blanca vetó a AP por negarse a utilizar el nombre Golfo de América?
Inglés como pasaporte al éxito profesional en sonora: un llamado urgente a la acción
Presenta Bertha Alcalde Plan de Trabajo 2024-2025 para FGJ
Qué santos se festejan el 13 de febrero, según el santoral