Las mamás, ¿cuándo meterse y cuándo no? Excelsior

 El medio del espectáculo es complicado para las jovencitas y jovencitos, por lo que en muchas ocasiones es importante que sus padres estén pendientes de cualquier riesgo para protegerlos.
Eso es un hecho.
Pero de ahí a que ahora, utilizando las redes sociales, den comentarios y ofrezcan posturas, metiéndose más de la cuenta, con la supuesta intención de querer cuidar a sus retoños, eso ya es otra cosa.
Ejemplos hay muchos, pero podría destacar a doña Dulce Canseco, Lucero León y Yolanda Leguizamo.
Dulce Canseco estuvo detrás de la carrera de Yuri.
Lucero León siempre pendiente de Lucero.
Y Yolanda Leguizamo, parte importante del éxito de Carlos Espejel.
Fui testigo de cómo ellas tres cuidaban a sus hijos en todo momento, los alejaban de los buitres que se acercaban para ofrecerles ascensos en sus carreras a cambio de cosas indebidas.
Y de ello había mucho, pero supieron sacarlos adelante, a pesar de las mismas inquietudes de sus hijos y los deseos de volar.
Muchos me dirán que antes las cosas se manejaban diferente, pero puedo poner un ejemplo más, un ejemplo actual: Andrea Legarreta, que ha estado detrás de Mía y Nina Rubín, y las dos llevan una carrera prometedora.
Pero eso es muy diferente a lo que han hecho Belinda Schüll y Silvia Cristina Nodal, mamás de Belinda y de Christian Nodal, respectivamente.
Aprovechando las redes sociales, las dos señoras se han dedicado a dar sus posturas y ofrecer comentarios que nadie les ha pedido, sobre la relación que mantenían sus hijos y sobre todo después de su separación.
¿Esto que ha provocado? Que sus hijos estén en el ojo del huracán y que se hagan vulnerables ante los comentarios de quienes las leen en las redes sociales y de los distintos medios de comunicación, que se han acabado, materialmente, a los artistas.
Les han dicho de todo, han surgido comentarios muy desagradables para ellos, y todo provocado por esas publicaciones de las madres de ambos, lo cual es contrario a lo que cualquier progenitora desearía.
Y, para colmo, ya también la abuelita de Christian Nodal le atizó al fuego con sus comentarios.
A ver señoras, sus hijos decidieron tener una relación sentimental.
Y cada beso, caricia y momento que pasaron juntos fue por iniciativa propia.
No les pidieron permiso.
Creo que deberían mantenerse al margen y, si quieren ayudarlos, denles todos los consejos que quieran, pero en privado, sin compartirlo a la opinión pública, porque están provocando un circo de tres pistas.
Te invito a que me des tu opinión: escríbeme a mi correo, a mi Instagram y a Twitter en @Jc_Cuellar.
   Columnista: Juan Carlos CuéllarImágen Portada: Imágen Principal: Send to NewsML Feed: 0