Marchan médicos en Torreón para pedir liberación de colega de Oaxaca El Siglo de Torreón
Médicos de La Laguna salieron este domingo a las calles de Torreón para manifestar su solidaridad al doctor Luis “N”, acusado en el estado de Oaxaca de homicidio doloso, esto luego de la muerte de un niño de tres años de edad por presunta negligencia médica, ocurrida en noviembre de 2017.
En la marcha, que se realizó a nivel nacional, el gremio exige la liberación del médico, que se reclasifique el delito que se le imputa y que sean peritos especialistas en medicina los que lleven a cabo las investigaciones del caso para determinar responsabilidades.
La protesta pacífica partió minutos después de las 9 de la mañana de la Plaza Mayor de Torreón y culminó con un mitin al exterior de la Clínica 71 del Seguro Social.
Los doctores portaron pancartas con leyendas de “No a la criminalización del acto médico.
#TodosSomosLuis” y “Somos médicos, no somos delincuentes”.
También lanzaron consignas de “El gremio unido jamás será vencido”.
“La idea es mostrar el apoyo y que sea reconsiderada la situación legal del compañero puesto que lamentablemente falleció el paciente en un acto quirúrgico debido a una reacción adversa no conocida ni por los padres ni por el propio cirujano”, señaló Eloy Héctor Rivera de la Cruz, presidente del Colegio de Traumatólogos de La Laguna.
Los profesionales de la Salud, resaltaron que las acciones que realizan es siempre buscando el bien del paciente y que “en ningún momento” tienen la intención de causarle algún daño.
Los hechos ocurrieron en noviembre de 2017 cuando a consecuencia de una caída, el niño de nombre Edward fue hospitalizado e intervenido quirúrgicamente en una clínica particular de la colonia Reforma en la capital de Oaxaca.
Sin embargo, más tarde falleció, presuntamente por una reacción alérgica a la anestesia.
EN CONTEXTO
La Fiscalía General del Estado de Oaxaca, consideró que existen elementos de prueba suficientes para sostener que el traumatólogo tratante, Luis “N”.
, incurrió en homicidio intencional, con agravante de responsabilidad médica, por lo que el responsable de aplicar la anestesia al menor, está en prisión preventiva, esto después de que un juez lo vinculara a proceso.
De ser encontrado culpable, el doctor acusado puede recibir entre 8 y 20 años de cárcel.
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