Fueron igual de transas El Imparcial Tijuana
La guerra política interna en Morena es evidente de costa a costa y de frontera a frontera. No solo cuando vienen elecciones en un Estado o la presidencial, también hay regiones en las que la frustración de perder el poder los hace enemigos peligrosos para sus sucesores, principalmente cuando son del mismo partido.
Por supuesto que el que llega empieza a hurgar en los archivos y se va dando cuenta de las tranzas y cochinadas que hizo el anterior, empiezan a sacar de bajo la alfombra la basura que habían escondido al barrer.
Eso está pasando en Baja California, Jaime Bonilla Valdez sigue cuestionando las acciones que su sucesora, Marina del Pilar Ávila Olmeda, a través de mensajes, ya no es gobernador, pero se quedó acostumbrado a hablar por las mañanas para denostar a toda la gente, como lo hace el Presidente de la República cada mañana, únicamente que Bonilla gobernó dos años y Andrés Manuel López Obrador lleva tres y le faltan tres.
Este jueves en la “Mañanera de los Miércoles” de Marina del Pilar, empezó a mostrar las cochinadas que hizo Bonilla. Usted está pensando este cuate se equivocó, cómo la “Mañanera de los Miércoles” en jueves, lo que pasó es que la gobernadora estuvo el miércoles en la Ciudad de México acompañando al presidente López Obrador en su mensaje al cumplir tres años de haber tomado posesión como Presidente de México.
En esta mañanera, muy diferentes a las del buscapleitos de la Liber, aquí si hay periodistas y preguntan de todo, hasta del marido de Marina y su función en el gobierno, hablamos de Carlos Torres Torres, pregunta hecha por la periodista, Jesusa Cervantes, de la revista Proceso, Marina dijo que Carlos no recibe sueldo alguno y le está ayudando en procesos específicos como los centros históricos y los programas de movilidad. Bonilla se la pasaba criticando a periodistas como Ailín Corpus, Érika Gallegos o Adela Navarro Bello.
Salió a la luz la serie de contratos realizados por el gobierno de Bonilla, como el realizado con la empresa que dota de alimento a los reos de los Ceresos del estado, hizo un contrato a 6 años y eso no está bien; el contrato de la planta fotovoltaica, por la que se tendría que pagar 6 mil millones de pesos y el tren interurbano de Tijuana. Así como el contrato a la empresa estadounidense Worldwide Environmental Products, Inc, que iba instalar en el estado centros de verificación vehicular.
El contrato de arrendamiento de un local en Centro Cívico de Mexicali, celebrado dos días antes de concluir su gestión, por 3 millones de pesos, donde sería la sede del Centro de Conciliación Laboral, que es un órgano del nuevo Sistema de Justicia Laboral. En este último asunto estuvieron involucrados los secretarios de Trabajo, Luis Algorri, quien sustituyó a Sergio Moctezuma. Por las condiciones deplorables del inmueble no se pudo echar andar el Centro de Conciliación, el cual debería haber empezado a trabajar el 3 de noviembre, se otorgó una prórroga de 90 días.
Hay que recordar que desde antes de tomar posesión el malapaga de Bonilla, ya se habían descubierto los famosos moches. Lo más grave es la deuda del gobierno de Baja California. Según el Secretario de Hacienda del Estado, Marco Antonio Moreno Mexia, asciende los 27 mil millones de pesos y si se consideran los compromisos contingentes, como los 6 mil millones de la planta fotovoltaica, el rango del pasivo estaría de alrededor de 35 mil millones de pesos. Esto es lo que han encontrado en su inicia, ¿qué más hicieron?
*El autor es periodista independiente
