Flavio Briatore respaldó a Christian Horner tras el repentino despido de Red Bull Racing: “20 años en la cima lo dicen todo” Infobae
La Fórmula 1 transita por estas horas sobre una de las noticias más impactantes de sus últimos años con el repentino despido de Christian Horner de Red Bull Racing tras dos décadas de éxitos y en medio de meses en el centro de una profunda crisis interna que incluye malos resultados, salidas de personajes claves del equipo y una pelea política puertas adentro que lo puso en jaque.
Mientras se empiezan a absorber los primeros coletazos de este movimiento sobre uno de los equipos más ganadores de los últimos años, una figura de la categoría decidió salir a respaldar al ex jefe de la escudería del energizante: Flavio Briatore, líder de Alpine.
“20 años en la cima lo dicen todo. Un competidor en la pista pero también un amigo fuera de la pista. Bien hecho en tus logros Christian Horner en Red Bull Racing y te deseo todo lo mejor en tu próxima aventura. ¡Forza Christian!“, escribió el empresario italiano de 75 años que transitó previamente un camino de éxitos absolutos y también de conflictos que lo eyectaron de la F1 hasta su retorno al mando de Alpine en los últimos tiempos.
Horner desembarcó en el 2005 para ponerse al frente del proyecto de Red Bull Racing, que por entonces ocupó el lugar de Jaguar Racing en la F1. En esa era, Flavio era el todopoderoso jefe del campeón Renault, y se mantendría allí hasta su renuncia en 2009 por el escándalo del CrashGate, que lo mantuvo alejado de la escena hasta su retorno a Alpine en 2024. Casualmente, esa temporada 2009 fue el inicio del ciclo más exitoso de Horner con un segundo puesto en el Campeonato de Constructores y el de Pilotos de la mano de un Sebastian Vettel que estaba en la puerta del ciclo de cuatro títulos que firmó del 2010 al 2013.
La era Horner se terminó a mitad de la temporada 2025, donde Red Bull Racing ocupa el cuarto lugar del Campeonato de Constructores, con serio riesgo de terminar en ese lugar por primera vez desde 2015. Los malos resultados del curso actual son una continuidad de la notable merma de rendimiento del monoplaza en el cierre del año anterior, pero también un correlato de la profunda crisis interna que tiene la escudería del energizante. El enfrentamiento de Horner con el Clan Verstappen –que integran también su padre Jos y el asesor Helmut Marko– pusieron un signo de interrogación sobre el futuro del campeón Max en el equipo mientras Toto Wolff presiona para llevárselo a Mercedes. Todo esto como fichas de un mismo tablero que vio la denuncia interna de una empleada que afrontó Christian, el movimiento de tres pilotos en un puñado de meses –Checo Pérez, Liam Lawson y Yuki Tsunoda– y el adiós de trabajadores clave de la estructura con Adrian Newey como caso paradigmático.
Al mismo tiempo, Briatore tampoco convive con una situación sencilla en Alpine más allá del inesperado resultado positivo que consiguió Pierre Gasly en la última cambiante carrera del GP de Gran Bretaña. El jefe de la escudería Oliver Oakes renunció a inicios de mayo, poco antes de conocerse que su hermano era foco de una sensible investigación en Reino Unido.
En ese contexto, Flavio tomó el rol de líder interino del equipo, ascendió a Franco Colapinto en el lugar de Jack Doohan y ahora esperará hasta que el 1 de septiembre Steve Nielsen asuma formalmente como nuevo Director General. Al mismo tiempo, diversos artículos periodísticos de medios europeos se encargan de alimentar la versión de una negociación con Valtteri Bottas y echan a rodar rumores que erosionan la figura del corredor argentino tras el problema de transmisión que sufrió su A525 en Silverstone.
