Sergio Peña casi se pelea en una fiesta mientras crecen rumores sobre su llegada a Alianza Lima Infobae
Sergio Peña se convirtió en tendencia por motivos ajenos al fútbol. Durante una fiesta el último fin de semana, fue grabado en un momento de alta tensión con otro asistente, lo que generó revuelo en redes sociales.
El volante, que suena como posible refuerzo de Alianza Lima, no ha dado declaraciones públicas sobre el incidente. Pese a la controversia, figuras como Paolo Guerrero ya han manifestado su respaldo ante un eventual fichaje del mediocampista.
En paralelo, se habla de un principio de acuerdo entre Peña y el club íntimo, aunque su salida del PAOK griego aún no estaría completamente definida.
Una noche, una frase y una amenaza
La calma de un evento privado se rompió cuando Sergio Peña, sin mediar muchas palabras, se dirigió con tono desafiante a un hombre presente. Un breve video viralizó el instante exacto en que el jugador lanza una advertencia directa: “¿Te pego? ¿Qué chu.. va a pasar?”. La frase bastó para desatar una ola de comentarios en redes, donde se debatió si el futbolista cruzó los límites o solo reaccionó a una provocación previa.
No se conocen aún las razones que motivaron la escena, pero el registro de ‘Amor y Fuego’ muestra a Peña visiblemente alterado. A su alrededor, algunas personas intentaron calmar la situación antes de que pasara a mayores. Aunque no se llegó a un enfrentamiento físico, el gesto encendió las alarmas mediáticas.
Los representantes del jugador no han emitido pronunciamientos oficiales, mientras que algunos sectores de la prensa deportiva han cuestionado el momento del episodio, justo cuando Peña atraviesa una etapa decisiva en su carrera profesional.
Alianza Lima y un acuerdo en puertas
Pese al escándalo, la directiva de Alianza Lima no ha descartado el interés en incorporar a Peña a su plantilla. Según versiones recientes, ya se habría alcanzado un principio de acuerdo con el entorno del mediocampista. La operación depende ahora de resolver aspectos contractuales con el club griego PAOK, donde el jugador todavía tiene vínculo.
La posibilidad de su regreso a la Liga 1 ha ilusionado a una parte de la hinchada blanquiazul, que lo recuerda como uno de los talentos nacionales más técnicos de su generación. Peña, formado en las divisiones menores del club íntimo, nunca debutó oficialmente en el primer equipo antes de migrar al extranjero. Por eso, su fichaje tendría también un valor simbólico.
No obstante, analistas deportivos consideran que el incidente reciente podría interferir en las negociaciones si los patrocinadores del club deciden pronunciarse o condicionar su participación. Por ahora, el panorama sigue abierto y no hay una confirmación definitiva.
Paolo Guerrero le da su apoyo
En medio del ruido mediático, una voz con peso propio se ha sumado a la conversación: Paolo Guerrero. El excapitán de la selección peruana, ídolo de Alianza Lima y actual delantero del club, fue consultado por la posible llegada de Peña. Su respuesta no dejó dudas.
“Sería un gran aporte. Es un jugador con talento, visión y experiencia internacional. Tiene todo para vestir esta camiseta”, afirmó Guerrero en declaraciones recientes. Más aún, lo describió como un futbolista que podría adaptarse rápidamente al ritmo del torneo local.
Sus palabras no solo funcionaron como respaldo deportivo, sino también como un gesto de confianza personal. En momentos donde la imagen pública de Peña podría verse afectada, el espaldarazo de Paolo podría ayudar a equilibrar la balanza.
Una carrera entre luces y sombras
La trayectoria de Sergio Peña ha estado marcada por contrastes. Formado en Alianza, pasó por Europa y defendió los colores de la selección peruana en torneos importantes como la Copa América y las eliminatorias mundialistas. Su estilo de juego, técnico y cerebral, ha sido valorado tanto por entrenadores como por analistas.
Sin embargo, no es la primera vez que su vida personal se entrecruza con polémicas. El futbolista ha estado en el centro de rumores mediáticos relacionados con su entorno familiar, relaciones amorosas y decisiones fuera del campo.
Ahora, con 28 años, Peña enfrenta el reto de reposicionarse en el fútbol nacional. La posible vuelta a Alianza Lima lo pondría bajo los reflectores de una hinchada exigente y de un entorno que no perdona distracciones.
Lo ocurrido en el evento social podría ser interpretado como un traspié menor o como un síntoma de tensión acumulada. Todo dependerá de lo que suceda en las próximas semanas y, sobre todo, de cómo responda dentro del campo si el pase finalmente se concreta.
