España decide si entrega a Ecuador al líder de Tiguerones por asaltar una televisión Infobae
Madrid, 1 jun (EFE).- La justicia española celebrará este lunes la segunda vista de extradición de uno de los considerados líderes de la banda criminal Los Tiguerones de Ecuador, en esta ocasión por su presunta participación en el asalto del canal TC Televisión en enero de 2024, en la que los implicados llegaron a amenazar al presentador de un programa.
En su primera vista el mes pasado, el tribunal español de la Audiencia Nacional ya aceptó extraditar a William Jofre Alcívar, conocido como Comandante Willy.
La resolución de la Audiencia Nacional, que se encuentra recurrida, condiciona la entrega del reclamado a que Ecuador aporte "garantía suficiente" de haber adoptado medidas para garantizar la integridad de los presos recluidos en sus cárceles y de "que la situación de las prisiones se ha normalizado".
En esa ocasión, el tribunal decidió atender a lo que dictaminen los órganos de observación especializados del sistema de protección regional de los derechos humanos.
Ahora, el mismo tribunal estudiará la segunda petición de entrega que pesa contra el Comandante Willy, en este caso por un delito de terrorismo por el que le reclaman las autoridades ecuatorianas.
Durante la vista, la Fiscalía apoyará la entrega del reclamado al considerar que se cumplen los requisitos legales para ello.
El Comandante Willy fue detenido en la localidad de Segur de Calaffel (noreste de España) junto a su hermano Álex Iván, Ronco, -ambos considerados cabecillas de Los Tiguerones-, el pasado 23 de octubre por la Guardia Civil, en colaboración con la Policía de Ecuador.
Entre los actos cometidos por esta banda destaca el asalto al canal de televisión ecuatoriano TC Televisión de Guayaquil mientras emitían un informativo en directo, hechos por los que se estudiará este lunes su extradición.
Más de una decena de miembros de dicha organización, encapuchados y provistos de armas de fuego, granadas y explosivos, asaltaron las instalaciones del canal aterrorizando a trabajadores y a los telespectadores, en una acción que buscaba coaccionar al Gobierno ecuatoriano para que cesara la presión policial sobre las bandas criminales del país catalogadas como terroristas.
Según el escrito de la Fiscalía, los implicados llegaron a amenazar a uno de los presentadores, "con armas de fuego apuntando a su cabeza y colocando elementos explosivos en el bolsillo de su chaqueta" para que "solicitara de rodillas que no le hiciera daño". Los trabajadores fueron obligados a pedir a los policías que abandonaran las instalaciones.
A los Tiguerones también se le atribuye el asesinato de César Suárez, el fiscal ecuatoriano encargado de la investigación de dicho asalto y que murió acribillado por varios disparos días después del inicio de la investigación por delitos de terrorismo a la organización criminal. EFE
