La Comunidad china en Panamá celebra su Año Nuevo en medio de la polémica sobre el Canal Infobae
Ciudad de Panamá, 29 ene (EFE).- La predominante comunidad china en Panamá celebra este miércoles el Año Nuevo chino, una festividad que coincide esta semana con la visita al país del secretario de Estado de EE.UU., Marco Rubio, criticado por vincular la operación del Canal interoceánico con una supuesta influencia de China, algo que el Gobierno panameño niega.
El Año Nuevo chino, que este 2025 corresponde a la serpiente de madera que simboliza la "versatilidad, la inteligencia y astucia" y que cumple 171 años de estarse celebrando en Panamá, comenzó este miércoles sus festejos en el histórico barrio de la comunidad asiática situado en el Casco Antiguo de la capital.
Cada uno de las decenas de comercios que operan los orientales en el lugar fueron visitados por sus paisanos que los "bendijeron" con la danza del león y el dragón.
"En este caso usamos más el león, que es más versátil para venir a espantar los malos espíritus, usando petardos y a la vez trayéndole la bendición y la prosperidad a través de la danza donde se bendice al comercio", dijo a EFE José Manuel Chung, en medio del estallido de los fuegos de artificio.
Los comercios por su parte entregan un racimo de hojas verdes que representa una comida, que es la ofrenda hecha "a cambio de la bendición que se le está haciendo en la visita que ofrecemos hoy el día de Año Nuevo", indicó Chung, miembro de la Sociedad de Beneficiencia Fayen, organizadora de la actividad en el barrio chino, que acogió a los primeros emigrantes asiáticos establecidos en este sector.
Las actividades se extenderán prácticamente a todas las capitales de las diez provincias del país, mientras que la comunidad china también se reunirá en familia para "celebrar en comunión el Año Nuevo" de la serpiente, añadió Chung.
"La serpiente de madera, como saben, es un animal muy astuto, muy ágil y se tiene que considerar eso como un preanuncio de las actividades que supuestamente nos rigen este año, que es la serpiente con su versatilidad, la inteligencia y astucia que debe tener el animal", afirmó.
El Año Nuevo con que la comunidad china se despide del dragón y recibe a la serpiente de madera coincide con la visita este fin de semana a Panamá del nuevo secretario de Estado de Estados Unidos, Marco Rubio.
Su visita se da en un momento de tensión por la promesa del presidente de EE.UU., Donald Trump, de "recuperar" el control estadounidense sobre el Canal de Panamá y su crítica sobre la supuesta influencia china sobre la vía.
Durante su audiencia de confirmación en el Senado, Rubio sugirió que el uso que China hace del Canal de Panamá supone una violación a los términos de la entrega de esa vía interoceánica a los panameños.
"Eso es definitivamente negativo. Como panameño chino, yo jamás he visto una administración (china) en el canal de Panamá. Pero sí puede haber un panameño de ascendencia china trabajando en el canal, sí, pero esas personas (son) considerados como panameños", dijo a los periodistas Tony Jiang, presidente en el país centroamericano de la Sociedad de Beneficiencia Fayen.
Jiang resaltó que como panameño de ascendencia china, y como parte de esa comunidad que lleva "casi dos siglos" en estas tierras, "apoyamos al pueblo y (consideramos) que la soberanía panameña es sin negociación. O sea, estamos firmes juntos con el pueblo panameño".
"Panamá es un país crisol de razas. Aquí existen afro, ahí existe chino, existe indio, judío, español, italiano, hebreo, o sea, existe una gran cantidad de panameños de diferentes razas", remarcó Jiang.
La comunidad china de Panamá, que comenzó a establecerse a mediados de 1800 atraída por la construcción del ferrocarril, es considerada una de las más populosas de Centroamérica, y representa alrededor de 4 % de la población de acuerdo a datos oficiales, con una influencia en el sector comercial muy notable y sólida.
Tras el establecimiento de las relaciones diplomáticas entre Panamá y China en junio de 2017 se han potenciado los nexos de negocios, y grandes consorcios chinos están a cargo de obras en el país. EFE
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