Casa Blanca afirma que Elon Musk no dirige DOGE: ¿Quien es Amy Gleason, la verdadera directora? El Financiero
La Casa Blanca dijo que el jefe del Departamento de Eficiencia Gubernamental (DOGE) —la amplia iniciativa de reducción de costos federales asociada con Elon Musk— es una funcionaria poco conocida llamada Amy Gleason.
Gleason, ejecutivo de tecnología de atención médica, se desempeña como administradora interina de DOGE, según un funcionario de la Casa Blanca, que solicitó el anonimato para discutir un asunto que no es público.
La revelación se produjo después de que la Casa Blanca enfrentara reiteradas preguntas de los periodistas sobre quién dirige la iniciativa del poder ejecutivo, pero se negó a nombrar al funcionario.
El acuerdo implica que Musk no ostenta el papel legal de director de DOGE, aunque el multimillonario supervisa y parece dirigir sus actividades. Es inusual que se mantenga en privado la identidad del director de una agencia gubernamental.
¿Cuál es la relación oficial de Elon Musk con DOGE?
Las preguntas sobre la relación oficial de Musk con DOGE, una operación bajo la jurisdicción de la Oficina de Administración y Presupuesto de la Casa Blanca, han estado en el centro de las batallas legales sobre las acciones de DOGE, que han incluido amplios recortes de empleos, cancelación de contratos gubernamentales e intentos de cerrar agencias federales enteras.
“¿Dónde está el señor Musk en todo esto?”, preguntó la jueza de distrito estadounidense Colleen Kollar-Kotelly a los abogados del gobierno durante una audiencia judicial el lunes en una de las demandas.
La abogada del Departamento de Justicia respondió que, si bien Musk es asesor de Trump, no podía identificar al administrador de DOGE, ni siquiera confirmar que exista uno. El abogado tampoco pudo decir si DOGE es una agencia oficial del gobierno.
La Casa Blanca dijo en una presentación judicial reciente que el multimillonario es un asesor principal del presidente Donald Trump y no un empleado de DOGE.
Como asesor del presidente en la Casa Blanca, en lugar de empleado oficial de DOGE, el asesoramiento de Musk probablemente estará protegido por el privilegio ejecutivo y sus comunicaciones no estarán sujetas a la Ley de Libertad de Información.
Aun así, es Musk, no Gleason, quien ha sido la cara pública de DOGE, hablando sobre los esfuerzos de reducción de costos junto a Trump desde la Oficina Oval y publicando en X sobre los planes de DOGE, incluidas amenazas de despedir a los trabajadores federales que no cumplan con sus solicitudes.
En su página de LinkedIn, Gleason se identifica como asesora principal del Servicio DOGE de Estados Unidos, una agencia de la Casa Blanca enfocada en mejorar la tecnología fundada como el Servicio Digital de Estados Unidos por el presidente Barack Obama y rebautizada por Trump. Trabajó en esa agencia durante la primera administración de Trump y durante la presidencia de Joe Biden.
El puesto de administrador de DOGE reporta a la jefa de gabinete de la Casa Blanca, Susie Wiles, según una orden ejecutiva que Trump firmó el 20 de enero.
El currículum de Gleason muestra que pasó los últimos tres años en Russell Street Ventures, una empresa de inversión en atención médica de Nashville, Tennessee.
