Feminicidio de Fátima: el duro recorrido para levantar un acta de desaparición en la CDMX El Gráfico

Una crisis de esquizofrenia impidió que María llegara a tiempo para recoger a su hija de la escuela.
La ausencia de la madre fue aprovechada por quienes raptaron y mataron a Fátima.
El martes pasado, a las 6:30 de la tarde, la escuela Enrique Rébsamen cerró el portón del plantel.
A esa hora salen los escolares del turno vespertino de la primaria ubicada en el pueblo de Tulyehualco.
A nadie le importó que los niños, que aún esperaban la llegada de sus padres, quedaran en la calle y sin vigilancia.
Uno de esos menores era Fátima, la niña de siete años que, parada frente a la entrada de la escuela, esperó a que su madre la buscara.
Ella no llegó.
Y es que como otros días, la mujer padeció un ataque esquizofrénico que la alejó de la escuela de su hija.
En el plantel, las madres de familia sabían de la enfermedad de María.
También sabían que el padecimiento obligaba a otros familiares a hacerse cargo de la niña.
Por eso, quienes la conocían no desconfiaron de la mujer que el martes pasado se acercó a Fátima.
 Te puede inetersar: Difunden video de mujer que se llevó a Fátima, fiscalía ofrece recompensa por informaciónLos testigos vieron cómo la tomó de la mano y caminaron hacia la zona del Cerrito.
Pensaron que sería una de las familiares de la niña, pero a las 7:50, uno de sus hermanos llegó en busca de Fátima.
No halló a la menor.
Tampoco a algún profesor que le indicara dónde estaba la niña.
Por eso, él recorrió los puestos del mercado en los que la menor solía comprar.
Los vendedores no la habían visto.
Horas después, vecinos, comerciantes y familiares sabían de la desaparición de la niña.
Te puede interesar: Todo lo que se sabe del asesinato de Fátima, la menor que fue hallada en TláhuacEsa misma noche, la familia acudió a la agencia en Xochimilco para iniciar un acta de desaparición.
En la agencia les negaron la atención bajo el argumento que la escuela está en el límite de la alcaldía y que la búsqueda le correspondía a Tláhuac.
Al amanecer, en las oficinas de Tláhuac, tuvieron la misma respuesta.
Por eso, la familia de la menor decidió indagar con la ayuda de las cámaras de vigilancia de los negocios del pueblo.
Y sí, fue la imagen de una cámara de un local la que captó a la mujer y a la niña caminar por Tulyehualco.
Con la imagen y las declaraciones de los testigos fueron de nueva cuenta a la agencia de Tláhuac.
Ahí, los enviaron a la Fiscalía especializada en búsqueda de personas desaparecidas, en Azcapotzalco, donde levantaron la Alerta Amber.
Según la familia, ya habían perdido las horas más importantes para poder localizar a la niña.
Así, de agencia en agencia, lograron que dos policías los ayudaran a recorrer las calles del pueblo.
Cinco días pasaron sin ninguna respuesta de la Fiscalía.
 Te puede interesar: Madre de Fátima revela nombre del presunto asesino de su hijaEl sábado por la noche, el tío de Fátima se enteró por que en el mismo pueblo habían encontrado un cadáver.
Era el cuerpo de una niña, del que se decía le habían robado los órganos.
La familia trató de indagar si se trataba de Fátima, pero no hallaron respuestas.
La mañana del domingo los requirieron en la Fiscalía para identificar un cuerpo envuelto en un costal y que había sido hallado en un terreno baldío.
Ese era el cadáver de Fátima.
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