Cada vez que tiene lugar el inicio de un nuevo año, teorías conspirativas y del fin del mundo surgen a lo largo y ancho de Internet; que ahora si el mundo se va acabar, que es en este periodo cuando seremos visitados por seres de otro planeta, el inicio de la tercera guerra mundial se acerca, entre otras cosas; y como no podía faltar, el 2020 no fue la excepción.
Tras las controversiales noticias que se han estado dando en Medio Oriente, donde las relaciones diplomáticas entre Irán y Estados Unidos han tenido fuertes tensiones, los internautas han hecho lo suyo; afirman que el proyecto científico HAARP es en realidad un arma secreta.
Ubicado en la localidad de Gakona, en el estado de Alaska, E.
U, el proyecto HAARP, por sus siglas en inglés High Frecuency Active Auroral Research Progam (Programa de Investigación de Aurora Activa de Alta Frecuencia) se encarga de estudiar las características de la ionósfera, para así poder transmitir radiofrecuencias que ayuden a la resolución de problemas de telecomunicaciones, al igual que proporcionan un gran soporte a los sistemas de vigilancia estratégica gubernamental.
Con un poder de 180 antenas de alta frecuencia, esparcidas en un terreno de 14 hectáreas, y financiado por la Fuerza Aérea y la Marina de los Estados Unidos, las actividades del programa se encargan también de mejorar la tecnología que detecta misiles de países enemigos.
Tras lo anterior, y por los también recientes desastres naturales que han tenido lugar a lo ancho del globo, usuarios de redes sociales creen que estas investigaciones son en realidad una cortina de humo, y que HAARP se encarga de controlar las condiciones climatológicas para beneficio de la Unión Americana.
Entre las características de la “supuesta arma secreta” se encuentran la generación de sismos, tsunamis, huracanes e incluso el calentamiento global.
Algunos afirman que incluso otras naciones de primer mundo están inmiscuidas en el proyecto, las cuales protegen su posición económica y militar ante los países en vías de desarrollo.
Como todas las teorías conspirativas que surgen en el entramado de la web, muchas personas creen que lo anterior son rumores, y que para que estas afirmaciones sean ciertas debe haber, ante todo, pruebas científicas.
Lo que sí es verdad es que los investigadores que trabajan en HAARP pudieron lograr, en el año 2006, fabricar la primera aurora boreal artificial de la historia.
La idea de este proyecto se le atribuye a los experimentos del científico e ingeniero eléctrico estadounidense Nikola Tesla, quien en 1891 logró que su corriente alterna, que producía rayos similares a los de la naturaleza, sentara las bases para el mejoramiento de las radiocomunicaciones.
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