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Es una banda que combina el soul, es decir, parte de la tradición negra llevada a la música, con la ideología y cosmovisión tojolabal, señaló Javier Reyes, quien ejecuta el bajo en esa agrupación que alista la presentación de su primer disco "Qué dice tu corazón".
El instrumentista de la agrupación emanada de la escuela de música "Del rock a la palabra" explicó que en la cosmovisión tojolabal no hay una palabra que defina "yo" porque todo es "nosotros".
Ese concepto se define como "tik".
En esencia, la banda sigue esa línea.
Ese trabajo con espíritu comunitario, señaló Reyes, ha llevado a los miembros de la agrupación a realizar juntos el trabajo, lo mismo la letra y la música de sus canciones que la selección de los invitados que los acompañan en sus conciertos.
Esa idea los llevó a grabar dicha producción discográfica.
La organización de los conciertos también se hace de conformidad entre los integrantes del grupo, además de que en cada uno de ellos procuran tener al menos un invitado de lujo.
"La música es una propuesta nueva, cobijada por la cultura tojolabal, y las letras no se limitan a tocar temas universales como el amor y el desamor, la vida y la muerte", aseguró.
Para el músico sus letras son más profundas y tienen relación con la naturaleza.
Soultik, dice, tiene mucho amor para dar, no solamente a la pareja, sino a la naturaleza, al mundo y a todos los seres que lo habitan, a los individuos de los reinos que desde siempre han poblado el planeta y que ahora se encuentra en serio riesgo de extinción.
"Tratamos de tener una actitud inclusiva ante el mundo, ante las ideologías y las visiones de todos y junto con ellas, plasmar las nuestras sin hacer divisiones entre nosotros y el resto del mundo.
Sabemos que todos tenemos algo qué decir y algo para dar", sostuvo.
En la escuela conocieron a un historiador y músico alemán, quien un día decidió salir de su país natal y llegó a México por casualidad.
Se acercó a una comunidad tojolabal y en ese lugar se sorprendieron porque el alemán no llegó con actitud de enseñar, sino de aprender de sus costumbres y forma de entender al mundo.
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