Hay optimismo pero también riesgos en la Inteligencia Artificial El Siglo de Torreón

Rose Luckin, profesora del Instituto de Educación, University College London, y una de las 20 personas más influyentes en la Educación de acuerdo al Seldon List 2017, se muestra optimista respecto a proveer una buena educación si se utiliza sabiamente la Inteligencia Artificial (IA), sin embargo, está consciente de que existe toda una gama de riesgos asociados, como el dejar de reconocer que la inteligencia humana “es mucho más rica” que cualquier otra inteligencia automatizada y el comprometer la privacidad y protección de datos.
Por ello, considera que el desarrollo de la IA debe estar regulado para que su uso sea más benéfico que perjudicial para la humanidad, además de que se debe educar a la sociedad sobre los alcances e impacto de esta tecnología.
“Existe el riesgo de que permitamos que la inteligencia artificial domine o se encargue demasiado de lo que nosotros como humanos hacemos y podemos hacer, necesitamos seguir utilizando nuestra inteligencia para poder desarrollarla y ser más y más inteligentes.
El segundo riesgo tiene que ver con la ética, cuando se tiene tecnología se utilizan los datos de las personas, hay toda una gama de riesgos asociados desde el hecho de si los datos se están recabando con el conocimiento de esa persona hasta cómo se almacenan y quién tiene acceso a ellos y la forma en que se manipula la inteligencia artificial por el algoritmo y su diseño”, comentó.
TRAYECTORIA Rose, de trato afable, es profesora de Diseño Centrado en el Alumno en UCL Knowledge Lab de Londres.
Es investigadora del diseño y la evaluación de la tecnología educativa con teorías de las ciencias y técnicas de aprendizaje de la IA y está interesada en la Inteligencia Artificial para abrir la “caja negra” del aprendizaje, para mostrarle a los maestros y estudiantes el detalle de su progreso intelectual, emocional y social.
Además, es fiduciaria de caridad de UFI, gobernadora y fideicomisaria de la escuela St Paul´s School en Londres y gobernadora de Self-Managed Learning College en Brighton.
Luckin estuvo en la Arena Borregos del Instituto Tecnológico de Monterrey, campus Monterrey para impartir la conferencia: Enhancing Learning and Teaching with Technology.
Su presentación, la hizo en el marco del Quinto Congreso Internacional de Innovación Educativa (CIIE) que se clausura este miércoles.
La ponente, no dudó en decir que la inteligencia artificial y los acontecimientos recientes en este campo son un catalizador que ayudan a reevaluar la inteligencia humana.
“Porque hemos creado sistemas de inteligencia artificial para que hagan cosas que nosotros valoramos porque nos va a ahorrar dinero, vehículos autónomos, por ejemplo, o en la imagen intelectual de nuestra propia inteligencia.
Hemos creado sistemas que se basan en conocimientos, recuerdan datos, pueden identificar respuestas muy precisas a las cosas, pero la inteligencia humana abarca muchísimo más que simplemente inteligencia de datos, creo que es importante que la inteligencia artificial pueda ser conocedora e inteligente de una manera muy específica y eso es un catalizador para nosotros poder entender nuestra propia inteligencia humana de una manera más rica, como un valor a cultivar”, expresó.
MÉXICO Y EL DESARROLLO DE LA INTELIGENCIA ARTIFICIAL La profesora señaló que en América Latina y particularmente en países como México y Brasil hay mucho potencial respecto a desarrollar la Inteligencia Artificial aplicada en el ámbito educativo, mayormente en el diseño de sistemas para apoyar en la enseñanza-aprendizaje individualizado y en el reconocimiento de emociones con base en expresiones faciales.
“Creo que el Tecnológico de Monterrey y otras universidades están dando evidencia de que van a ayudar a México a ponerlo en una buena posición.
Sí hay países que están invirtiendo enormes cantidades de dinero en la Inteligencia Artificial como China o los Estados Unidos pero no estoy convencida de que necesariamente signifique que desarrollarán las mejores soluciones porque a veces las mejores soluciones vienen de los innovadores que están más cercanos a los verdaderos problemas que se tienen que resolver con la IA, así que Latinoamérica y especialmente México, está en una muy buena posición para desarrollar innovaciones que pudieran abrir camino para otros países”, concluyó.
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