Preocupa pérdida de densidad poblacional en Torreón El Siglo de Torreón

Advierten la necesidad de desarrollar proyectos verticales de vivienda, con usos mixtos para la conservación del medio ambiente, además de contemplar la regulación del uso de agua y fomentarse el uso de energías renovables.
El arquitecto Óscar Martínez, comisionado del Capítulo Monterrey de la Academia Nacional de Arquitectura, estuvo en Torreón por invitación del Instituto Municipal de Planeación y Competitividad (Implan), ofreció una conferencia sobre Ciudad y Desarrollo Urbano, y citó el caso de Monterrey y su área metropolitana, que en 1960 tenía una densidad poblacional de 107 habitantes por hectárea, pero bajó considerablemente a 13 habitantes por hectárea para el año 2017.
Esto debido a que consideró que Torreón pareciera encaminarse en esta misma dirección, pues mientras la mancha urbana ha crecido siete veces, la población no se desarrolla en esta misma proporción.
Martínez señaló que hay errores en Monterrey como el que la extensión de la mancha urbana ha creado una ciudad fragmentada; sin infraestructura adecuada ni transporte eficiente, el tiempo improductivo invertido en traslados, pérdida de calidad de vida, alto costo de infraestructura, inseguridad; segregación social, abandono del campo, especulación de la tierra.
El especialista dijo que la meta universal en el siglo XXI es la de caminar hacia hacia un modelo de ciudad sostenible que contemple la reducción de hidrocarburos y la inclusión inaplazable de energías renovables, pero indicó que todo lo anterior no puede ser posible sin el urbanismo participativo.
Señaló que, en materia de planeación urbana, la verticalidad en los proyectos y desarrollos permitirán no sólo los usos mixtos compactos sino la conservación del medio ambiente, recuperando incluso parte de la biodiversidad que se perdió en el desarrollo urbano del siglo XX en las ciudades.
Dijo que el consumo de agua deberá regularse y fomentarse la utilización de energías renovables para usos domésticos, y contemplarse en la reglamentación y lineamientos de los nuevos desarrollos.
"Es indispensable", concluyó el arquitecto.
Guillermo Saldaña, gerente de Canadevi Laguna, expuso a Martínez que la vivienda vertical en Torreón ha sido un fracaso porque hay un problema de cultura, a lo que el especialista señaló que no es algo privativo de esta ciudad, pues hace 20 años se tenía el mismo impacto en Monterrey y esta visión ha tenido que ir cambiando al "educar a los clientes" para vivir en comunidad, por lo que recomendó a los desarrolladores una campaña de concientización.
Martínez insistió en que se requiere dar un mayor valor al peatón, mejorar la densidad, manejar ciudades más compactas y concientizar sobre que la tierra es un recurso agotable.
Dijo que las calles completas son sueños urbanos que ofrecen mayor seguridad al peatón y al ciclista, pero también hay espacio para el transporte público y el automóvil, por lo que debe ser una meta del ciudadano, un ideal que ya se vive en otros países y que sería muy interesante perseguir en México.
Más información en El Siglo de Torreón