Peloteros mexicanos tienen las puertas cerradas en MLB El Siglo de Torreón

Las negociaciones entre MLB y la Liga Mexicana de Beisbol no han llegado un acuerdo, por lo que peloteros nacionales tienen la puerta cerrada para emigrar a Estados Unidos.
Algunas irregularidades en las firmas para contratar a un jugador han ocasionado la relación rota con Grandes Ligas, por ejemplo, el caso de Florencio Serrano con los Cubs de Chicago.
El año pasado, los Cubs habían contratado al lanzador diestro por 1.
2 millones de dólares, proveniente de los Toros de Tijuana, más nunca llegó el tricolor a la Ciudad de los Vientos.
De acuerdo con el portal baseballamerica.
com, el negocio interno entre Tijuana con Serrano bloqueó el pase.
Los equipos de la Liga Mexicana, en la mayoría de los casos, mantienen el 75 por ciento del dinero, y el otro 25 por ciento va al jugador.
Cuando los Cubs quisieron firmar al diestro, estaban sancionados de firmar a jugadores internacionales por una cantidad mayor a los 300 mil dólares, por superar el bono a extranjeros.
Chicago tenía contemplado que, en caso de contratar a Serrano por 1.
2 millones, la cantidad que ingresaría a su bolsillo sería de 300 mil, justo para no violar el castigo de Grandes Ligas.
Sin embargo, Tijuana y el pelotero, en ese entonces de 17 años de edad, habían acordado dividirse la ganancia al 50 por ciento.
Serrano era uno de los mejores prospectos en 2017, considerado como el mejor jugador de nuestro país, más los negocios impidieron su salida a la Gran Carpa.
Durante el mismo año, MLB descubrió que algunas franquicias de la LMB no informaban las cantidades precisas de dinero que recibirían los jugadores en sus fichajes.
Según el mismo portal, jugadores de México están descontentos con un sistema que consideran injusto, lo que permite que los equipos guarden la mayoría de los montos de sus firmas.
Para los jugadores, un sistema en el que podrían recibir el 75 por ciento del monto de la firma en lugar del 25 por ciento sería una mejora significativa y más consistente con lo que sus contrapartes de la República Dominicana y Venezuela mantienen fuera de sus bonos.
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