Advierten sobre consumo de drogas y alcohol en prepas Frontera.info
16 de Agosto, 2018 22:10
Debido a que el primer consumo de drogas y alcohol sucede en la preparatoria, ya sea de forma voluntaria o por alguna broma entre compañeros, el Centro de Integración Juvenil (CIJ) A.
C.
recomendó a los padres de familia y alumnos poner atención en lo que consumen dentro de los planteles escolares.
María Idalia Vázquez Leyva, directora del CIJ de la colonia Guaycura, comentó que ya es común que los jóvenes introduzcan drogas en los alimentos (como los brownies) y adulteren las bebidas alcohólicas.
“Hay que asegurarse que las bebidas estén cerradas, hay que comprarlas uno mismo, porque está el riesgo de hacer bromas o juegos, pero no saben la magnitud de las consecuencias”, dijo.
De acuerdo al reporte del segundo semestre de 2017 del Consumo de drogas ‘Alguna Vez en la Vida’ en pacientes de los CIJ en el Estado, el 89% de los pacientes del primer ingreso dijo que consumió mariguana; el 62.
7% metanfetaminas y 41.
7% cocaína.
En ese mismo periodo pero de 2016, el 91.
6% fue por mariguana, 64% por metanfetaminas y el 51% por cocaína.
Vázquez Leyva dijo que en la mayoría de los casos los pacientes, de 10 a 29 años, cedieron a la presión social de sus amigos o para controlar sus emociones, como la timidez.
Como le pasó a Cristhian, quien en su niñez por tener tiempo libre y desear saber que se siente estar en estado etílico, consumió alcohol y después la mariguana.
Por ello, enfatizó que si los jóvenes quieren experimentar que lo hagan después de sus 24 años, de lo contrario tendrá afectaciones físicas, sicológicas y sociales.
“Entre más tarde inicien en la experimentación o el consumo será mejor, porque antes afecta la toma de las decisiones, emociones”, advirtió la directora del CIJ.
Y aunque los jóvenes se escuden en que las bebidas alcohólicas dañan más que las drogas, también hay afectaciones en la conducta, en los reflejos, al grado de llegar a alucinar, agregó.
Para mayor información ingresar en la página del CIJ, en donde conocerá estrategias, a través del deporte para recibir técnicas de cómo evitar consumir sustancias o bebidas prohibidas.
El proceso de tratamiento será de tres a seis meses, dependiendo la voluntad de la persona y dependiendo del nivel de consumo.
