"La justicia tiene que llegar", padres ABC Elimparcial.com Sonora

Después de haber pasado nueve años del incendio de la Guardería ABC, la familia Barrios Trujillo mantiene la esperanza de que algún día habrá justicia para los 49 niños que fallecieron y los que tienen secuelas por el siniestro.
Nicolás, de 12 años, y María Fernanda, de 9, son sobrevivientes del incendio ocurrido un 5 de junio del 2009; sin embargo, a pesar de parecer sanos, Nicolás aún tiene cicatrices de quemaduras en sus manos y frente, mientras que María Fernanda no ha dejado el tratamiento para poder respirar sin dificultad.
Sus padres, María Guadalupe Trujillo y Nicolás Barrios, señalaron que ha sido una lucha difícil a lo largo de casi una década, en la cual han tenido que llevar a sus dos hijos a consultas médicas y sicológicas para buscar un remedio a los estragos que dejó aquel día.
A la fecha, continúan los tratamientos para sanar las heridas para ambos niños; sin embargo, según un diagnóstico realizado poco después del incendio, María Fernanda tiene secuelas que afectaron su sistema respiratorio, pero no fue reconocida como afectada.
Reviven el momento "Después del incendio Nicolás tenía mucho miedo a salir, le tenía mucho miedo a las luces, a los fuegos artificiales; si había mucha gente entraba en pánico y corría y yo estaba por volverme loca porque el niño revivía el momento", expresó María Guadalupe, madre de los menores.
Para el pequeño Nicolás fue tardada la asimilación de lo que había pasado, debido a que no comentaba acerca del tema, aunque a la fecha es más grande, aún le causa molestia lo sucedido aquel 5 de junio.
"Fue tardado, el niño ni lo quería asimilar, no se desahogaba, no lo platicaba hasta después, ahorita tiene 12 años y no le gusta tocar el tema", comentó la madre de familia.
En su momento, las atenciones médicas fueron para Nicolás, desconociendo los padres que la pequeña María Fernanda también había sido afectada por el siniestro, que a la fecha continúa con problemas respiratorios.
"Un día le dije a mi suegra que se llevara a la niña a dormir para yo quedarme en el hospital con Nicolás y quedarme las 24 horas despierta por el niño y muy temprano llegó mi suegra al día siguiente, y me dijo que no había podido dormir la niña, ya que traía mucha tos y mucho moquito color negro", expuso.
No la reconocen Fue entonces cuando el pediatra atendió a la menor, pero desde aquel día la menor continúa con medicamentos, además de no ser reconocida como lesionada a pesar de ingerir medicinas recomendadas para personas asmáticas.
Según un diagnóstico realizado por las autoridades en materia de Salud, María Fernanda se encuentra sana, pero su madre se cuestiona realmente la validez de aquel estudio debido a que la menor continúa con tratamiento médico.
El padre, Nicolás, recordó aquel momento, cuando sonó su celular mientras estaba reunido con un cliente de su trabajo, al momento de contestar le comentó con urgencia un familiar que la guardería donde estaban Nicolás y María Fernanda, en ese entonces de 3 años y cuatro meses respectivamente, se estaba incendiando.
"Yo pensé que era cualquier incendio, como de matorral a un lado, y ya lo escuché alarmado y no le hice mucho caso; pero sí fue motivo para que me levantara de mi lugar y me fuera a la oficina para ver qué es lo que estaba sucediendo, iba entrando yo a mi negocio y salió mi esposa en su camioneta", apuntó.
María Fernanda, de hoy 9 años, estaba siendo resguardada en una de las casas vecinas a la Guardería ABC, mientras que su hermano estaba internado en el hospital Licona con quemaduras en sus brazos, orejas y frente.
El padre de familia manifestó que esperaba un panorama más desolador, pero la tranquilidad lo invadió al saber que su hijo había resultado con lesiones que no ponían en riesgo si vida.
Los papás agradecieron a los héroes que ayudaron a sacar a los niños, entre ellos Cayetano, quien valerosamente entró al inmueble en llamas para salvar a los pequeños, entre ellos Nicolás.
"La verdad le agradezco que haya tenido ese impulso, he escuchado cosas de él pero le doy gracias a Dios, no he encontrado valor de irle a dar las gracias porque me atacó pero lo vamos a hacer", comentó el padre de familia.
Entre lágrimas, María Guadalupe, dio gracias a su valentía ya que ayudaron a salvar la vida de los niños.
En cuanto al caso ABC, ambos padres confían en que habrá justicia ya que continuarán en la lucha por sus hijos, así como también otros afectados y los 49 niños que fallecieron en el incendio.