El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, criticó al Tribunal Supremo por investigar a diputados de su entorno por una supuesta trama de diseminación de fake news.
El fiscal general Augusto Aras, por su parte, opinó que "el contenido incisivo" en redes sociales "no puede ser confundido con la práctica de calumnias, injurias o difamaciones".