“QUE SE CALME, LAS COSAS VAN A CAMBIAR” Sol Yucatán
Dr. Santiago Alamilla Bazán
Esa fue la frase que profirió una candidata de morena cuando se refirió a un conocido periodista, Tony Peraza, caricaturista en la prensa local. En sí misma esta frase envuelve una serie de situaciones que describen de cuerpo entero la posición de la prensa durante el obradorato, pero se adereza y potencia viniendo de boca de quien es hija del secretario de seguridad del estado yucateco.
Desde el primer día de la administración del actual presidente de la República, el señalamiento y acoso hacia la prensa que no le gusta al mandatario ha sido el sello con el que todos los días por la mañana, en el AMLO show se ha caracterizado por denostar, acosar e incluso amenazar a los compañeros de la prensa.
Esta situación tomó un punto álgido de no retorno cuando implementó el 30 de junio de 2021 su sección de “Quien es quién en las mentiras”, desde donde la señorita Vilchis se dedica a insultar y tratar de desacreditar, en algunos minutos, los trabajos de los compañeros periodistas que en la mayoría de los casos toman meses de investigación y comprobación de hipótesis, para que en solamente unos cuantos minutos la señorita de las mentiras trate de tirar por tierra toda una investigación rigurosa y sus conclusiones, que le resultan incómodas al Presidente.
Según el informe para 2023 de Artículo 19, en México existieron 561 casos de agresiones a la prensa, cinco de ellos fueron por el asesinato de periodistas, 12 secuestros, una desaparición forzada, 11 detenciones, 293 ataques y agresiones, 73 discursos estigmatizantes, 4 casos de tortura, 11 usos abusivos del poder del estado entre los más importantes.
En lo que va del gobierno de AMLO han sido 43 los periodistas que han perdido la vida en México, el 76% de las agresiones a los profesionales de la información fueron sobre compañeros que investigaban y documentaban actos de corrupción, política y temas sobre la seguridad y la justicia. A nivel internacional se considera que es el propio Presidente quien orquesta este clima contra el periodismo ya que ha resultado el principal acosador desde sus mañaneras.
En lo personal, junto con el equipo de periodistas con los que trabajo, me ha tocado aparecer en algunas ocasiones en los discursos presidenciales contra los trabajos periodísticos, el caso de los ventiladores del Conacyt, la vacuna patria que fue originalmente una vacuna para pollos, el caso del uso de la matrícula de un avión de la guardia nacional para vuelos en una aeronave privada y el cocinero particular del presidente. El intento de desacreditar cada nota raya a veces en lo ridículo, como fue el caso de los ventiladores que fabricó el Conacyt y que sería la “nueva industria mexicana” pero que resultaron un fiasco reglándolos a Cuba; en aquella oportunidad, la señorita de las mentiras esgrimió “no son 200 los ventiladores enviados a Cuba, son 150 del Ehecatl y 50 del Gatsbi”.
Lo que sí es cierto es que una vez que apareces en esa sección, los insultos y amenazas que se reciben se cuentan por centenares o miles, la mayoría son de bots que son fácilmente identificables, pero hay algunas, dos o tres que sí son de preocuparse y de llamar la atención. En mi caso, después de la publicación del fiasco de los ventiladores del Conacyt, recibí varios comentarios interesante, y cuando me inconformé de lo que dijo la Vilchis, recibí en el domicilio de mi madre en la ciudad de Mérida una respuesta por escrito; lo interesante es que no había pedido que así fuera y la dirección a la que estaba dirigida la correspondencia mezcló la dirección de mi señora madre y la de la casa donde viven mis hijos, en un claro mensaje de que cuentan con toda la información que necesitan para localizarme.
Yucatán es el segundo lugar nacional de amenazas a periodistas, el tranquilo estado peninsular no lo es para los comunicadores y desafortunadamente, los yucatecos fieles a nuestra forma de ser, preferimos pensar otras cosas antes de aceptar que no vivimos en el paraíso y que estamos también con problemas que requieren nuestra atención. No debemos olvidar que el periodista más atacado y amenazado en todo este sexenio es yucateco, Carlos Loret de Mola, pero también a nivel local hay casos de periodistas golpeados, amenazados e incluso lesionados.
Las palabras de la candidata morenista no deben tomarse a la ligera, es el sentir y es el pensar de algunos políticos, no hay que olvidar a Alito que recomienda no atacarnos físicamente pero sí matarnos de hambre; semanas antes de la desafortunada expresión sin filtro de la señorita Saidén, los morenistas locales protagonizaron un sainete en una rueda de prensa donde se enfrentaron con compañeros de los medios que fueron invitados para cubrirla. No es nuevo que los periodistas que no aplauden al gobernante, en este caso al aspirante a gobernante, son relegados y señalados. En el mismo ayuntamiento de Mérida hay casos de compañeros que han sido maltratados, hostigados o eliminados de los grupos de prensa por haber escrito algo que no le gustó al alcalde o a su directora de prensa, el maltrato a los periodistas existe en todos los niveles de gobierno de todos los colores, algunos más que otros, pero existe en todos lados, eso es lo que informan organizaciones internacionales de periodistas, e incluso documentos oficiales del gobierno de los estados unidos. México es el país que no está en guerra donde ejercer el periodismo es más que peligroso.
Cerrando con lo que dijo la candidata, que las “cosas van a cambiar”, si van a hacerlo para que sigan los acosos, hostigamientos y amenazas que hay a nivel nacional comandadas por el mismo presidente de la República, y ahora será el gobernador de morena quien haga lo mismo a nivel local y pida que corran a compañeros como el aludido a cambio de seguir pagando publicidad en medios, o que cree su sección local de quien es quien en las mentiras, o tenga su corifeo de “influencers” o focas aplaudidoras para que celebren todas sus ocurrencias como sucede en el centro; en ese caso, aunque nos falta mucho por mejorar, prefiero que no cambie nada. Mi solidaridad con Tony, con Manrique, con Shasti, con Taco y con una larga lista de periodistas y comunicadores yucatecos que han visto la mala cara de los que quieren “que estemos calmados”.
Te podría interesar:
The post “QUE SE CALME, LAS COSAS VAN A CAMBIAR” appeared first on Sol Yucatán.
